La polémica de las bebidas procesadas

La tendencia de lo fit y lo saludable ha hecho que cada vez más personas reflexionen acerca de los componentes y efectos nocivos de alimentos y bebidas procesadas. Pero el incremento de la obesidad y de otras enfermedades ligadas a los malos hábitos alimenticios también han puesto en señal de alerta a grandes instituciones sobre este tema.

Es por esto que la Asociación Educar Consumidores lanzó un comercial de televisión que advertía sobre las supuestas consecuencias para la salud del consumo de bebidas azucaradas. Sin embargo, según dio a conocer en un comunicado la Superintendencia de Industria y Comercio, el ente de control “ordenó” retirar el comercial por considerar que sus afirmaciones “no cuentan con soporte científico o médico” para demostrar su veracidad.

La Superintendecia señaló que el producto publicitario asegura que todo tipo de gaseosa, jugo embotellado y té helado contiene azúcar y en la misma cantidad, lo cual “no es cierto”.

Mónica Ramírez, delegada para Protección al Consumidor de la Superintendecia, indicó que entre otras afirmaciones de la pieza publicitaria que no cuentan con respaldo científico está “la incidencia que tiene el azúcar en el surgimiento de las patologías médicas que ellos están mencionando en el comercial y las lesiones que surgen a partir de ellas, que también son ilustradas con imágenes muy fuertes”.

Ramírez agrega que “tampoco se encuentra un soporte que diga por qué el consumo de azúcar en esas dosis que ellos mencionan ahí, repercute en la salud de los consumidores”.

Por su parte, la economista Martha Sandoval, investigadora en Salud Pública de la Asociación Educar Consumidores, afirma que toda la evidencia científica está disponible y que está respaldada por la Organización Mundial de la Salud (OMS). “No es una evidencia científica de la Asociación Educar, sino una que ha recolectado la OMS y es justamente por eso que la Asociación hace estas recomendaciones. Hay todo un sustento alrededor del tema”.

Sandoval explica que la Asociación se basa en la resolución 0288, que habla sobre los requisitos de rotulado y etiquetado nutricional de los alimentos envasados, para afirmar lo que está en el comercial. “La resolución 0288 te dice cómo medir el contenido de azúcar en cada una de las bebidas. Lo que está allí expuesto es en conjunto lo que tienen las bebidas azucaradas”.

Adicional al retiro del comercial, el ente de control “someterá a control previo” las piezas publicitarias que la Asociación Educar quiera trasmitir en medios de comunicación sobre el consumo de bebidas azucaradas.

Sobre las bebidas

La nutricionista Ana María Sirtori, docente de la Universidad Libre, explica que lo primero que se debe conocer sobre las bebidas procesadas es que contienen preservantes y conservantes especiales, que son sustancias químicas utilizadas para que el producto no se dañe.

El otro aspecto a conocer de estas bebidas es su alto contenido de azúcar, la principal razón por las que son señaladas. Sirtori indica que al leer la tabla nutricional de estos productos se puede encontrar que cada bebida contiene como mínimo 15 gramos de azúcar, cantidad que según la Guía Alimentaria colombiana, es la que se debe consumir por día.

La psicóloga asegura que existen algunos jugos que contienen hasta más de 40 gramos. No obstante, algunas marcas de bebidas procesadas han incluido en sus productos opciones bajas en azúcar y endulzadas con otras alternativas como stevia.

Pros y contras

Laura Piedrahita, coach nutricional, señala que la facilidad de portabilidad, almacenamiento e incluso variedad de un jugo o alimento empacado, ha hecho que las personas los consuman en exceso, que es allí donde está en problema, “desconociendo en muchos casos que tan buenos pueden ser para nuestra salud”.

Piedrahita explica que el hecho de asociar frutas con salud es muy común y cierto, pero que lo deja de ser cuando a un jugo de estos se le suman una serie de procesos químicos que afectan las propiedades naturales de frutas y verduras.

Para ella, un jugo procesado pierde nutrientes en el proceso de pasteurización, que se refiere al proceso en que la bebida es llevada a más de 80 grados y luego enfriada rápidamente para eliminar los microorganismos que podrían dañarla.

Señala que en cambio los jugos naturales pueden aportar vitaminas, minerales y energía al ser absorbido de manera más fácil por el cuerpo. “Los jugos naturales también contienen azúcar en forma de fructosa, que es la natural que trae la fruta. Esta debe ser consumida con medida porque sigue siendo azúcar, aunque es mucho más saludable que los añadidos”, explica Piedrahita.

Por su parte, Sirtori comenta que las bebidas procesadas endulzadas con stevia son una mejor opción porque tienen menos calorías. Sin embargo, asegura que estas se deben consumir de forma mínima porque, aunque no contienen azúcar, siguen teniendo sustancias químicas que pueden afectar al hígado.

“El hígado se cansa porque es nuestro depurador número uno y no puede estar manejando tanta carga de sustancia. Los jóvenes no prestan atención a eso porque los daños no son inmediatos, sino que con el tiempo nuestro organismo va repercutiendo”, dice la nutricionista.

Con respeto a las bebidas “cero azúcar” o endulzados con edulcorantes, Piedrahita agrega que a veces, no siempre, puede tratarse de un engaño publicitario. Por esto es importante aprender a leer las etiquetas y listado de ingredientes de los productos que se consumen.

La couch nutricional cuenta que en ocasiones los azucares pueden estar escondidos bajo otros nombres comunes como jarabe de maíz o corn syrup, polialcoholes como maltitol, maltodextrina, azúcar de caña, entre otros. “No se trata de satanizar el azúcar pero si evitar su consumo elevado y frecuente. Por lo que se recomienda que un producto no contenga más de 5 gramos de azúcar por porción, para ser considerado moderado en azucares”.