En 2022 se abrirá otro proceso para construir la regasificadora del Pacífico
La planta como está contemplada tiene capacidad de poner en el sistema 400 giga btu y su costo es de cerca de usd800 millones.
Un nuevo proceso para buscar un inversionista que desarrolle el proyecto de la planta regasificadora del Pacífico se abrirá en el primer semestre del próximo año. Esto después de que la primera convocatoria fuera declarada desierta ya que no se recibieron propuestas.
El director de la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme), Christian Jaramillo, dijo que la planta de regasificación en el Pacífico es una necesidad que se identificó en los estudios del Plan Nacional de Abastecimiento de Gas y ya fue adoptada. Indicó que a menos que se encuentren razones válidas para reversar esta decisión, se seguirá el proceso.
La planta como está contemplada tiene capacidad de poner en el sistema 400 giga btu y su costo es de cerca de usd800 millones.
“En primera instancia el proceso quedó desierto, pero seguimos viendo la necesidad de hacerlo”, detalló.
Aclaró que el proceso no se abrirá en las mismas condiciones teniendo en cuenta que no fue interesante para los inversionistas por lo que se realizará un análisis de los puntos que resultaron difíciles de manejar en términos de riesgo para realizar los ajustes que se deben hacer y para determinar cómo se asignará dicho riesgo.
Como los principales temas que se deben revisar tienen que ver con el impacto del riesgo constructivo, no en la parte de ingeniería de la construcción sino en la gestión para entrar en el territorio y llevar a buen término la obra y a tiempo.
“Hay otros temas menores como la flexibilidad en la ubicación física de la obra y las condiciones en que entregan el gas, pero lo más difícil es cómo se gestiona el riesgo constructivo ante eventos que retrasen o vuelvan imposible la obra”, señaló el funcionario.
Destacó que los ajustes que se deben hacer no son todos del ámbito de la Upme, pues algunos están en el campo de la regulación o del Minminas.
Jaramillo indicó que ante el riesgo de un déficit, se pueden materializar algunas fuentes de gas que aún no se ven tan certeras y hay otras alternativas que no aportan tanta confiabilidad como la planta del Pacífico que inyectará el combustible al otro extremo del sistema.
“La segunda ventaja de esta planta es que reduce los trayectos que tiene que recorrer el gas para un porcentaje importante de los colombianos y que tiene un mayor costo para la población”, precisó.
Frente a la propuesta de una segunda planta regasificadora en la Costa Caribe, dijo que es bienvenida como una propuesta privada, pero no podría ser remunerada por todo el país ya que mantiene el problema de que seguiría inyectando el gas en el otro extremo del país y el otro extremo sigue limitado.
Además, si se construye la infraestructura de gas que permita directamente al sur del país se pueden reducir el costo de transporte, pero sigue siendo un recorrido largo con mayores costos.
El director de la Upme indicó que después de que se establezcan los beneficios de la planta se toma la determinación de quienes deben poner más o menos plata para pagar el proyecto, lo cual se determina mediante las directrices de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg).
Indicó que el proyecto de la panta tiene un costo que se remunera y habría un ajuste adicional en el componente de transporte, pero al bajar los costos por un menor recorrido de transporte, se compensa este ajuste.
