El Heraldo
Josefina Villarreal
Economía

El ‘paga diario’, un esquema de esclavitud financiera

La facilidad de acceso y la rapidez en la entrega del crédito atraen a quienes no ven una opción en el sistema financiero formal. La Policía dice que son ilegales y el Gobierno busca frenar este sistema.

“No le recomiendo a nadie hacer este tipo de préstamos. Se soluciona un problema de plata en el momento, pero después viene un infierno que no se lo deseo ni a mi peor enemigo”, dice María*, una comerciante barranquillera, a quien la necesidad de financiación la llevó a caer en las garras del ‘paga diario’.

María relata la experiencia por la que tuvo que pasar, al igual que muchos colombianos, que solo de esta manera han logrado acceder a un microcrédito para apalancar el negocio con el que se ganan la vida de manera digna.

Recuerda que tras tener reporte negativo en su historial crediticio por retrasos en los pagos de tres tarjetas de crédito, tuvo que recurrir a este esquema informal, aun sabiendo a lo que se exponía, pero sin más alternativas.

“Una persona conocida me los recomendó y me prestaron el dinero que necesitaba, me pareció una solución rápida, pero luego me di cuenta de que terminaría pagando más de la mitad del capital”, relata compungida.

“Conté con la ‘suerte’ de que el cobrador que me tocó era respetuoso, pero he conocido casos de personas a quienes les han quitado los electrodomésticos y otros elementos de su casa o los han maltratado porque no pueden pagar”, cuenta mientras sus ojos se posan en el infinito.

La historia se repite

Después de haber tratado sin éxito de lograr acceso al crédito en el sistema financiero tradicional o ni siquiera intentarlo, las personas que usan el ‘paga diario’, ven en esta modalidad una manera “fácil y rápida” de obtener un dinero que les ayude a salir de algún apuro inmediato o financiar su negocio.

Es el caso de María, quien pidió reserva de su identidad, dice que “gracias a Dios pude salir de todas estas deudas, pero lo que le digo a la gente es que evite a toda costa este tipo de préstamos. Lo mejor que se puede hace es cuidar su historial de crédito”.

Tal como esta comerciante barranquillera, son muchos los propietarios de micro o pequeños negocios no solo en Barranquilla sino en todo el país que por diversas razones se ven en la necesidad de realizar préstamos informales, ya sea por no tener historia crediticia o contar con reportes negativos en las centrales de riesgo.

Si bien no se tienen cifras claras de los recursos o personas que hacen parte de este mecanismo, precisamente por esta condición de informalidad, el Gobierno nacional calcula que son cerca de 10 millones de colombianos los que de alguna manera han usado este sistema que puede llegar a ser peligroso.

Un informe de la Policía Metropolitana de Barranquilla indica que las zonas en las que más se han detectado personas dedicadas a estos préstamos son los barrios del suroccidente, suroriente y parte del Centro de la ciudad.

“Quienes acceden a ellos, en su mayoría son personas que requieren dinero de manera rápida y no cumplen con requisitos para solicitar préstamos formalmente en entidades bancarias”, explica la institución.

Hernando José Gómez, presidente de Asobancaria, asegura que la principal causa del ‘gota a gota’ o ‘paga diario’ es que el acceso al crédito en Colombia “no es tan amplio como todos quisiéramos por cuenta de la alta informalidad de la economía”.

Una buena parte de esta situación se debe a la condición de no poder presentar la información que los bancos necesitan para otorgarles un crédito, y eso está muy relacionado con la informalidad de la economía colombiana.

Señala que a pesar de que los indicadores de inclusión financiera han avanzado mucho, y el año pasado ya se superó la meta del Plan Nacional de Desarrollo, los mismos reportes de la Banca de las Oportunidades hablaban de que solo 35 % de las personas tiene acceso a productos crediticios.

“Ese es uno de los temas en los que como sector tenemos que trabajar: aumentar el crédito para los microempresarios, para los emprendedores, para las mujeres, para los jóvenes”, detalla.

Otra posible causa del ‘paga diario’ también está relacionada con un tema de autoexclusión de las personas, es decir miedo de acudir a la banca. “Tenemos que trabajar en que la gente tenga confianza de ir al banco”.

Las cifras de la Superintendencia Financiera de Colombia indican que las tasas de aprobación de los créditos que van a las empresas, incluidas las microempresas, en el país son de 86,1 %. Por eso, la invitación es acudir a un banco para solicita crédito.

Así opera el paga diario

Por regla general, al acceder a un crédito por el esquema ‘paga diario’, una persona se compromete a pagar una tasa de interés del 20 % mensual sobre el capital que se presta.

A manera de ejemplo, si se prestan $100 mil, el cliente se compromete a pagar $20 mil de interés, lo que da un total de $120 mil entre capital e interés.

Como el pago se debe realizar en un mes, se divide la suma total en 30 cuotas que, en el caso del ejemplo, quedarían en $4 mil diarios.

El presidente de Asobancaria explica que los créditos formales son infinitamente más baratos que los de los ‘paga diario’, pues los bancos cobran algo más de 30 % anual por un microcrédito.

“Además, hay riesgos incalculables con los ‘gota a gota’, que pueden llegar a poner en peligro su vida, algo que no ocurre de ninguna manera en el sector financiero formal”, advierte.

Estos niveles de intereses no son legales en Colombia. La Policía Metropolitana de Barranquilla informa que los préstamos que sobrepasen la mitad de la tasa de interés que certifica la Superintendencia Financiera de Colombia se constituyen en un delito.

El interés bancario corriente efectivo anual para la modalidad de crédito de consumo y ordinario vigente en abril de ese año es de 19,05 % y para microcrédito es de 37,97%.

Por su parte, el interés bancario corriente para la modalidad de crédito de consumo de bajo monto es de 30,35 %.

La tasa de usura, que la máxima permitida, se sitúa en 28,58 % efectivo anual y para modalidad de microcrédito es de 56,96 % efectivo anual.

“La ley contempla que la usura se tipifica de la siguiente forma: el que reciba o cobre, directa o indirectamente, a cambio de préstamo de dinero o por concepto de venta de bienes o servicios a plazo, utilidad o ventaja que exceda en la mitad del interés bancario corriente que para el período correspondiente estén cobrando los bancos, según certificación de la Superintendencia Bancaria, cualquiera sea la forma utilizada para hacer constar la operación, ocultarla o disimularla, incurrirá en prisión de 32 a 90 meses y multa de 66.66 a 300 salarios mínimos legales mensuales vigentes”, destaca la entidad.

 

La Policía informa que se han desarrollado investigaciones que han llevado a la captura de personas relacionadas con los ‘gota a gota’ o ‘paga diario’ y han determinado que en su mayoría utilizan esta renta ilegal como forma de lavado de activos del tráfico local de estupefacientes.

Además, se ha comprobado que existen delitos conexos como el porte ilegal de armas, las amenazas, lesiones personales, entre otros.

“Gracias a labores investigativas se ha podido determinar que existen diferentes formas de actuar de las estructuras dedicadas a esta renta ilegal. Algunas utilizan las redes sociales para el ofrecimiento de dinero, otras solamente entregan dinero a referidos”, explica la institución.

La metodología de cobro la mayoría de las veces es igual, utilizando vehículos para el desplazamiento de los cobradores que tienen asignadas rutas de cobro y en ocasiones, estos se hacen con presiones o costreñimiento para obligar el pago del dinero.

“La invitación a quienes se sientan amenazados por los llamados ‘gota a gota’ o ‘paga diario’ es a que denuncien oportunamente; y a quienes tengan información que permita impactar a estructuras dedicadas a esta renta ilegal, que denuncien bajo total reserva a través de la línea 123”, precisa la entidad.

Cambios en el mercado de capitales

Consciente de las dificultades de acceso al sistema financiero de quienes más necesitan de recursos de crédito como son los pequeños y micro empresarios, el Gobierno nacional tramita el proyecto de Ley de Financiamiento para todos ante el Congreso de la República.

Su objetivo es dinamizar las alternativas de financiación para todos los colombianos.

El ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, destaca que se busca generar competencia para que haya más actores y beneficios dentro del sistema financiero. 

Con estos mecanismos de financiación se busca combatir la modalidad del ‘paga diario’, que se considera “un cáncer o una expresión de esclavitud financiera con el que sufren muchos colombianos”, señala.

Reitera que la lucha contra esta modalidad comienza con la democratización del acceso al crédito y fortaleciendo el de consumo de bajo monto, que es en promedio de $300 mil.

Se plantean medidas como promover la apertura simplificada de cuentas, extender las fuentes de información para el perfil crediticio y la entrega de garantías por parte del Estado del 90 % para los créditos de consumo de bajo monto con el Fondo Nacional de Garantías.

A esto se sumará un subsidio a la comisión de la garantía para dar mayor facilidad.

Se espera que en este proceso participen entidades financieras, Fintech, entidades del sector solidario, programas de crédito de entidades territoriales y otros.

El director de la Unidad de Regulación Financiera (URF), Pedro Felipe Lega, reitera que la razón por la que las personas usan el sistema de los ‘paga diario’ es la facilidad que ofrecen, por ello los cambios que plantea el proyecto están orientados a brindar facilidad de apertura y accesibilidad inmediata dentro de la formalidad con créditos razonables.

“Vamos a tener el atributo que tiene el ‘paga diario’, que es la apertura simple y rápida, pueden ser montos entre $100 mil y $300 mil para las personas que los necesitan, pero sin los intereses astronómicos, ya que cobran 20 % mensual, cuando este será el interés anual que se ofrecerá”, dice el funcionario.

Se entregan sumas de entre $100 mil y $300 mil.

Explica que la razón por la que las entidades originadoras de crédito no hacen estos préstamos es porque no cuentan con una garantía de pago y precisamente a eso apunta el proyecto, a dar una garantía con la que se cubra el capital.

Se espera que los créditos de bajo monto, sean rotativos, ya que en la medida que se vaya pagando el capital se podrá volver a acceder al monto asignado.

Sobre este proyecto, Freddy Castro, gerente de Banca de las Oportunidades, señala que atacar el problema de la ausencia de garantías es atacar uno de los grandes problemas que tiene el acceso financiero en el país.

Esta iniciativa beneficiará a las personas que no cuenta con un fiador, ni propiedades con las que respaldar las obligaciones crediticias.

Castro afirma además, que cada vez se están ofreciendo nuevas alternativas que le seguirán quitando espacios al esquema ‘paga diario’ para que las personas puedan lograr una formalidad financiera.

Asegura que actualmente más del 90 % de los colombianos cuenta con un producto financiero de depósito o crédito, pero el gran reto no es solamente aumentar la inclusión financiera en productos de depósito sino también de crédito. 

La informalidad tiene un costo

Freddy Castro, gerente del programa Banca de las Oportunidades que ejecuta la política de Inclusión Financiera de Colombia, señala que la facilidad y el desconocimiento son los factores que llevan a las personas a usar el esquema del ‘paga diario’.

En cuanto a la facilidad, se ofrece un dinero rápido y sin mayores requisitos en su sitio de negocio.

Pero también está el desconocimiento no solo de los que debe hacer para acceder al sistema financiero, sino a la manera como construir un historial crediticio.

 “La puerta de entrada al sistema financiero de una persona de bajos recursos no necesariamente tiene que ser una entidad grande, puede ser una microfinanciera”, explica Castro.

Como parte del desconocimiento también está lo relacionado con el manejo de la tasa de interés.

Señala que el impacto del esquema del ‘paga diario’ para los micronegocios es que no les permite crecer. “Se compromete el crecimiento y la sobrevivencia empresarial”.

La tasa de financiamiento es clave para la generación de valor y si esta es muy alta, como el caso del 20 % mensual que aplica para esquema informal, no se puede generar valor.

“Nunca se puede salir y se convierte en un círculo vicioso”, agrega.

El funcionario destaca la importancia de que las personas y empresas realicen esfuerzos para la formalización ya que la informalidad tiene sus costos.

“Uno de los costos de la informalidad es que no permite acceder a mecanismos de financiación formal”, detalla.

En este proceso es necesario construir inicialmente un historial financiero bien sea con aplicaciones o plataformas transaccionales con productos de depósito a través de los cuales se realicen y reciban pagos.

Contar con una tarjeta de crédito con un cupo que no sea tan alto es una alternativa para crear historial crediticio que le permita acceder a préstamos de bajo monto y en la medida que se cumpla con los pagos mejorará su calificación de crédito en las centrales de riesgo.

Facebook
Twitter
Messenger
Whatsapp
Convierta a El Heraldo en su fuente de noticias
X
COMO REPORTAR A WASAPEA
1. Agrega a tu celular el número de Wasapea a EL HERALDO: +57 310 438 3838
2. Envía tus reportes, denuncias y opiniones a través de textos, fotografías y videos. Recuerda grabar y fotografiar los hechos horizontalmente.
3. EL HERALDO se encargará de hacer seguimiento a la información para luego publicarla en nuestros sitio web.
4. Recuerda que puedes enviarnos un video selfie relatándonos la situación.