Entre el deporte y la política siempre ha existido una correlación directa. El deporte puede ser un símbolo de desarrollo económico y cultural, mientras que la política es importante para el éxito del deporte.
En muchos casos los propios deportistas han tomado las banderas políticas para luchar por lo que consideran justo para las distintas comunidades. La proclamación de George Weah como presidente de Liberia representa la máxima fusión entre estos dos ámbitos, ya que por primera vez un deportista (futbolista) de esta envergadura —ganador del Balón de Oro en 1995— se convierte en jefe de Estado en un país.
Para estas elecciones locales, un goleador histórico del Junior aspira al Consejo de Barranquilla. Martín Arzuaga Coronel espera anotar el próximo 27 de octubre el que será, quizá, el ‘gol’ más importante de su vida y de paso entrar en ese selecto grupo de exdeportistas que incursionaron con éxito en la política colombiana.
'En mi familia siempre ha habido esa vena política. Yo pienso que este es un espacio que debemos aprovechar nosotros los deportistas para asumir el rol de poder llevarles soluciones a las comunidades, ya que también somos ejemplos en la sociedad', manifestó, en diálogo con EL HERALDO, el ‘Toro de Becerril’, que hace parte de la lista de Cambio Radical al Concejo de Barranquilla.
¿Parte con ventaja un exdeportista entre los demás candidatos a cualquier puesto político? La historia, al parecer, muestra que no, porque han sido muchos los que no han podido lograr el objetivo de posicionarse en cargos públicos. Arzuaga considera que sí existe una pequeña ventaja, pero poseerla no te asegura el éxito.
'Yo parto con una ventaja social, parto con un reconocimiento, un aprecio, un agradecimiento, porque lo que he hecho como deportista es llevarle satisfacciones y alegrías al pueblo barranquillero. Hay mucho politiquero que ha basado su trabajo en otras cosas, yo lo he basado en el respeto, en el cariño, en la admiración y en el aprecio de la gente', comenta.
Arzuaga se inspira, entre muchas otras personas —del ámbito político—, en la expesista María Isabel Urrutia, campeona olímpica y mundial, que fue elegida a la Cámara por la circunscripción especial para Negritudes en 2002. Urrutia fue ponente de leyes contra la discriminación racial y de una ley que dedicaba un porcentaje del IVA a financiar los deportistas del ciclo olímpico y a garantizar pensiones a los atletas de alta competencia.
Ejemplos como estos inspiran a muchos otros deportistas a incursionar en un camino duro, espinoso, pero que puede traer grandes satisfacciones. Muchos se han quedado en el camino, pero otros, tanto en Colombia como en el mundo, insisten en seguir destacándose, pero en otro campo.