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Entre triunfos y derrotas, escándalos y zozobras ha transcurrido la vida del exboxeador cartagenero Miguel ‘Máscara’ Maturana. Besó la gloria en el boxeo aficionado al proclamarse campeón mundial del peso gallo en 1981, en Canadá (Montreal). Hasta hoy el único colombiano en conseguir tal distinción.

Vive en Sincelejo, retirado de su natal Cartagena de Indias. Dice estar tranquilo, exiliado momentáneamente del boxeo, pero gozando de una pensión vitalicia gracias a los miles de golpes que tiró y a los muchos que le tocó recibir.

¿Qué hay de la vida de Miguel ‘Máscara’ Maturana?

Me encuentro en mi rancho en Sincelejo, descansando al lado de mi familia y viviendo mi vida. Agradezco a Dios por haber conseguido ese título, el cual me fue recompensado con una pensión. Pedro Gutiérrez y otros amigos más me ayudaron en eso.

¿Se le demoró mucho la pensión?

Siempre. Llegó en el 2010, en ese año fui incluido en el programa ‘Glorias del Deportes’ de Coldeportes nacional.

¿Cómo se mantenía antes?

Antes tenía que hacer rifas, vender boletas, mantenía a mi familia así. Yo compraba abanicos, lavadoras, teléfonos, ropa y los rifaba.

¿Aún hace rifas?

No, la gente no quiere pagar (risas). Pero eso fue lo que me ayudó cuando no tenía nada.

¿Qué significó para usted ser campeón mundial aficionado?

Fue algo maravilloso. Siempre le agradezco a Dios por haber conseguido ese título.

Imagino que le tiene un gran aprecio a Canadá...

Bastante, Canadá significó mucho para mí porque conseguí esa medalla. Quisiera volver a visitarla y vivir nuevamente esa experiencia.

¿Y dónde conserva la medalla de oro?

Se la presté a un primo hace un tiempo y más nunca volví a saber nada.

¿Y no lo ha llamado para preguntarle dónde la tiene?

Yo no lo llamo, no tengo comunicación con él de ninguna especie.

¿Por qué vive en Sincelejo y no en Cartagena?

Porque mi mujer es de estos lados y porque tuve muchos problemas allá en Cartagena.

¿Pero piensa volver algún día a su tierra?

No quiero volver. Aunque uno no sabe, el que designa es Dios, pero bueno...

El 15 de mayo de 1985 ante Kelvin Seabrooks usted pudo ganar el título mundial de la división gallo, pero cayó noqueado en el quinto asalto, ¿qué le pasó?

Yo gané los primeros asaltos, tenía ‘bajito’ al gringo, después llegó el quinto y ajá, caí. Ante Seabrooks no tuve buena preparación y perdí la oportunidad de ganar un título mundial.

Pero usted era un boxeador entrador, no se arrugaba...

Yo era un boxeador bajito, pero técnico. Mi boxeo gustaba, pero ese día andaba mal. ¡Uff! Si yo hubiese estado preparado y con disciplina, yo hubiese sido campeón mundial!

¿Qué pasó después?

Nada, fue muy duro, pero seguí para adelante y seguí boxeando.

¿En su carrera a qué boxeador quiso enfrentar y nunca lo pudo hacer?

La verdad nunca quise enfrentar a alguien en especial. Mi apoderado me designaba mi oponente y yo iba y peleaba.

¿Ganó mucho dinero en el boxeo?

Gané una platica buena, pero cuando uno no sabe invertir, la plata se le acaba.

¿No ha pensado en ser entrenador de boxeo?

Lo fui. En Cartagena unos cubanos llegaron haciendo unos cursos y yo gané mi diploma. Me gusta entrenar, pero ahora estoy dedicado a mi familia.

Muchos boxeadores han caído en la droga, ¿por qué a usted lo salpicó también?

Yo llegué a la droga por ignorancia y malas amistades, por no tener capacidad, cometí muchos errores. Gracias a Dios mi señora Betty Narváez me ayudó mucho. No bebo ron, ando en mi rancho. Solo a veces salgo con la señora.

¿Qué le aconseja a los boxeadores que andan en esos malos pasos?

Que salgan de ese laberinto, que no se metan a ese mundo. Nada de trago, nada de malas amistades, nada de droga porque eso acaba a cualquiera.

¿Cómo ve el boxeo colombiano actualmente?

El boxeo a nivel nacional ha bajado, no es como antes que había tres o cuatro campeones mundiales, hay que meterle empuje y dinero para que los ‘pelaos’ quieran seguir luchando. Si no se hace, no habrá campeones mundiales.

¿Cree que Floyd Mayweather es el mejor boxeador de la historia?

No, hasta allá no. Ha habido mejores boxeadores como Sugar Ray Leonard, ‘Mano de Piedra’ Durán, Óscar De la Hoya, boxeadores con buena proyección. Mayweather es un buen boxeador, sabe pelear, la gente lo critica porque se defiende mucho, pero el boxeo es dar , pegar y mínimo que no te peguen.

¿Entonces para usted quién es el que debe ser catalogado como el mejor?

El mejor de la historia se llama Muhammad Alí. En Colombia el mejor para mi ha sido Antonio Cervantes, ‘Kid Pambelé’.

'No me siento culpable de la muerte del entrenador Carlos Arturo Osorio'

Miguel Maturana recibiendo una distinción en 1981.

¿Por qué Alí?

Porque era un gran pegador y tenía una gran popularidad.

Siempre ha causado curiosidad su apodo, ¿por qué se lo pusieron?

Eso fue en Cartagena, en el barrio Santa María. Resulta que yo estaba en una pelea y, bueno, en el ring, de un momento a otro, comencé a pelear como contra cinco y cuando salí del lugar, un amigo de una silla de ruedas, que creo que ya murió, me dijo: ¡Hey, te dejaron la cara como una máscara! Y bueno ahí fue todo.

¿Cómo siguió del accidente que tuvo en una moto hace dos años?

Me he sentido bien, fue un accidente fuerte, yo iba como parrillero, pero bueno, me operaron de un brazo y gracias a Dios las cosas mejoraron.

Otro momento desagradable en su vida fue la acusación de la muerte del entrenador Carlos Arturo Osorio, ¿en qué quedó el caso?

Dicen que yo lo golpeé, pero no fue así, en ningún momento lo agredí. Él tenía un problema con la úlcera y eso lo mató. Me acusaron y duré como seis días en prisión, pero puse abogados y salí porque no había hecho nada. No me he sentido ni me sentiré culpable de la muerte del entrenador Carlos Arturo Osorio.

¿Se siente tranquilo?

Yo fui una persona que ayudó a muchos entrenadores, entre ellos a Osorio. ¿Cómo iba a matar a mi entrenador? Gracias a Dios no ha pasado nada.

¿Aún lo llaman para eventos boxísticos o conferencias?

Sí, todavía me llaman para cualquier clase de evento y yo asisto sin ningún problema. Siempre estoy a disposición de lo que necesiten.