La polémica por el sargento que denunció violación de niña embera

El sargento (r) del Ejército, Juan Carlos Díaz, dijo estar indignado con el comandante del Ejército, general Eduardo Zapateiro, porque lo retiraron de la entidad, afirma, "por denunciar" a sus siete subalternos que violaron a una menor indígena en Risaralda hace un par de semanas.

Por su parte, Zapateiro asegura que el suboficial fue retirado por su responsabilidad en cadena de mando de los hechos y afirmó que era "su deber moral" reportar lo que había sucedido con los uniformados.

"Estoy indignado con el comandante del Ejército porque acusan al sargento como el culpable de todo (...). Jamás me dio la oportunidad de hablar (...), no recibí ningún apoyo del general después que informé del hecho. A mí me dieron la espalda y en ningún momento me respaldaron por haber denunciado", dijo el sargento en la emisora 'RCN Radio'.

El suboficial advirtió, no obstante, que no se arrepiente de la manera cómo procedió: "No me arrepiento porque son cosas que uno tiene que hacer y mi familia y mis padres me inculcaron que uno tiene que decir siempre la verdad. (...) Todo en este mundo se sabe y a mí me costó mi carrera, pero al que le cueste la carrera que no tenga miedo: es mejor andar con tranquilidad y no esconder cosas que algún día se van a saber".

Contó además el militar que entró al Ejército a los 17 años y que allí permaneció los último 18 años de su vida: "Me dan la notificación que soy retirado del servicio activo totalmente, o sea de por vida. Jamás esperé recibir esa noticia, porque durante 18 años le serví a la institución, dí lo mejor de mi juventud, tuve condecoraciones, reconocimientos. Y por un hecho desafortunado no me dejaron defender y ahora estoy en la civil".

Finalmente, acerca de la vigilancia que debía tener sobre los soldados violadores, aseguró que en su cargo tenía varias responsabilidades y que no era el único al mando de los soldados: "Éramos tres suboficiales con 30 soldados, no teníamos la unidad completa. (...) Ellos iban uno a uno y cometían el hecho, y así sucesivamente. Si hubiesen sido los siete, los centinelas habrían reportado".

Entre tanto, el comandante del Ejército aseguró que Díaz no salió por haber denunciado la violación sino por haber fallado en sus funciones de supervisión sobre los uniformados abusadores: "Sí tenían la responsabilidad del mando y control de los soldados que cometieron el hecho. (...) En ese sentido los otros dos suboficiales también fueron retirados. Quiero informar que era su deber moral, institucional y legal la de informar, ese es el proceder de cualquier servidor público".

Agregó Zapateiro que "la actuación del suboficial fue negligente, y esta incumple las normas mínimas de liderazgos militares, ya que no influyó lo necesario en sus hombres para que estos no se apartaran del Código de Honor del Soldado Colombiano".

De otro lado, distintos sectores políticos han reaccionado a la controversia que hay entre el general y el sargento (r), respaldando a una u otra de las partes.
 
La senadora Aída Avella, de los Decentes, criticó: "Si retiran del servicio al sargento Juan Carlos Díaz, por denunciar la violación de la niña embera, se deduce que deben callar ante semejante delito para continuar en el Ejército".

A su vez, el senador Roy Barreras, del Partido de la U, le advirtió al comandante del Ejército: "Señor general Zapateiro: usted acudirá a la plenaria del Senado para solicitar su ascenso a general pleno. Le preguntaré en esa sesión por qué destituyó al sargento Juan Carlos Díaz, el único que denunció la violación de la niña embera. Se transmite mensaje de impunidad y silencio.

La presidenta del Mais, Martha Peralta Epieyú, comentó: Retiran del Ejército al sargento viceprimero que denunció a los siete violadores de la niña embera. Protegen a los narcotraficantes, corruptos, violadores, genocidas. En este Gobierno los buenos pierden, como el policía que se negó a un desalojo violento".

Por otra parte, la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, salió en defensa de Zapateiro: "Nuestro apoyo al mensaje del general Eduardo Enrique Zapateiro y a su decisión de llevar a la justicia ordinaria a los violadores de niñas indígenas o de cualquier comunidad. Creemos en nuestro Ejército y la legitimidad institucional aplaude actitudes firmes contra los criminales".