Dos días después de la captura de Katerine Martínez, alias Gabriela, en Florencia, Caquetá, por su presunta participación en el atentado al precandidato presidencial Miguel Uribe, se conoció una parte de las declaraciones que la joven, oriunda de Soledad, entregó a la Fiscalía.
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Como se sabe, este martes se llevará a cabo la audiencia de medida de aseguramiento en contra de Martínez, a quien la Fiscalía le imputó los delitos de tentativa de homicidio agravado; fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones; y uso de menores de edad en la comisión de delitos.
De acuerdo con las investigaciones preliminares, Katerine Martínez tendría una relación con ‘el costeño’, hombre que también quedó registrado en las cámaras de seguridad del barrio Modelia.
De hecho así lo habría revelado Carlos Eduardo Mora González, quien fue capturado el jueves 12 de junio por presuntamente realizar el reconocimiento previo del parque El Golfito, donde se cometió el ataque al senador del Centro Democrático.
Según su declaración ante la Fiscalía, Mora —de nacionalidad venezolana— fue contactado a través de WhatsApp por un hombre apodado ‘El Costeño’, quien le ofreció cinco millones de pesos por colaborar en el desplazamiento del autor material del ataque.
Mientras que sobre ‘Gabriela’, Noticias RCN reveló parte de su expediente en el que mencionó que la tenían “amenazada”.
“Estoy detenida por homicidio, porte de arma y algo de menor de edad, pero yo estaba allí de pantalla (como distractora) porque me amenazaron”, expresó.
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Así mismo, se conoció que en el momento de su captura, ‘Gabriela’ tenía entre sus pertenencias al momento de la captura $1.100.000 y aunque las autoridades no se han pronunciado de fondo sobre este dinero, buscan establecer si este fue el pago por el rol que habría cumplido en el hecho criminal.
De acuerdo con una investigación realizada por el diario El Tiempo, la mujer inicialmente se estableció en la localidad de Tunjuelito pero posteriormente se trasladó al barrio Plaza de las Américas, específicamente a la dirección Primero de Mayo con 69 C. Esta ubicación coincide con el lugar donde Carlos Eduardo Mora González, conductor del Chevrolet Spark ya judicializado, recogía frecuentemente al presunto actor intelectual del atentado.
El día del atentado, Katerine Andrea actuó bajo el alias de “Gabriela” para coordinar aspectos cruciales de la operación criminal. Fue ella quien solicitó el servicio de motocicleta que transportaría al sicario desde la calle 69 B con carrera 94 hasta el barrio Modelia, donde Uribe Turbay se encontraba realizando un mitín político.
Las investigaciones establecieron que la joven también participó directamente en la entrega del arma homicida. Se bajó del Chevrolet Spark gris en el momento preciso para que el sicario recibiera la pistola Glock con la que ejecutaría el intento de magnicidio.
