A pesar que las autoridades y ganaderos conformaron un frente común para contrarrestar el robo de semovientes en el Cesar, incluso ‘blindando’ los caminos que conducen a la serranía del Perijá, por donde se llevan los animales hurtados, o los que llegan de contrabando por Venezuela; el flagelo del abigeato continúa en este departamento. Solo en las últimas dos semanas la Policía Fiscal y Aduanera registra la incautación de 106 reses que eran transportadas sin la documentación que acreditara su legalidad.
De la situación también da cuenta la recuperación el pasado sábado de 11 reses que habían sido hurtadas el cinco de julio anterior en la finca El Tamarindo en el corregimiento El Carmen, jurisdicción del municipio de El Paso.
Para recuperar el ganado, la Policía desarrolló un despliegue, con labores de investigación y operaciones soportadas en informaciones de cooperantes, que permitieron ubicar los semovientes en zona rural de esa localidad.
Un hombre que cuidaba los animales emprendió la huida al notar la presencia de los uniformados, que procedieron a verificar las marcas, coincidiendo con las que se habían reportado como robadas.
Los municipios con mayor incidencia de abigeato, después de Valledupar, son Codazzi, La Jagua de Ibirico y Astrea. 'Es un tema recurrente aunque hay épocas en que se incrementa, en otras disminuye pero nunca ha dejado de presentarse', aseveró Hernán Araujo Castro, presidente del Fondo Ganadero del Cesar. MB
