¿A quién le importa por quien va a votar usted?
Pero esa es la moda, voy a votar Sí, voy a votar No.
Qué polarización tan grande en este país, un hecho tan simple, pero trascendente como es aportar a la paz se volvió un debate, una guerra.
Sí, una guerra, lea bien una guerra.
¿Quién se perjudica si las Farc dejan las armas?
¿Quién se perjudica si van al Congreso 5 miembros de 120 que conforman esa colectividad?
¿No sirve el ejemplo del M-19?
Que Timochenko va a ser Presidente. ¿Usted va a votar por él? Es la única manera de que llegue a la Presidencia.
Me avergüenzo cuando leo las noticias internacionales, alabándonos por el acuerdo de paz logrado en Colombia y aquí una lucha tenaz. Quítense la máscara, es si gana Santos o Uribe. Santos por el Sí, Uribe por el No.
Si usted es Uribista, tiene que votar No, y no por convicción, sino porque el jefe manda y yo obedezco; le comento a mis amigas del No, donde están esas palabras hermosas de Jesús: “Perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos al que nos ofende”. El Padre Nuestro, la más bella oración de los católicos. Y si va a votar Sí no es para estar en contra del otro, es para que sus hijos, mis nietos, tengan una vida diferente. ¡Libérense!
Voten por convicción, de corazón, por conveniencia para las generaciones venideras, olvídense de Santos, de Uribe, de la Sra. Cabal, piensen en pasear por las hermosas carreteras colombianas de hermosos paisajes, que el paseo en carro sea una opción; que los noticieros empiecen todos los días, como hace tres meses, sin ataques guerrilleros. Es el primer paso.
Esperemos que las otras organizaciones guerrilleras y al margen de la Ley, sigan ese camino y en diez años Colombia sea un país libre de guerrilla.
¿Es muy difícil para usted comprenderlo?
Será que al fin deponen los ánimos políticos y piensan en usted, sus hijos y sus nietos?
Métele un gol a la guerra, no te arrepentirás.
Bertha Benedetti de Carbonell
kika.carbonell@hotmail.com
