Los seres humanos que se dejan llevar por las emociones siempre caen en profundas lamentaciones. En Barranquilla convergen tres tipos de miserables, un primer grupo formado por aquellos que a duras penas tienen como vivir y del que tanto hablaba Víctor Hugo, un segundo grupo está constituido por los que se creen inmensamente superiores a los primeros porque tienen mejores condiciones de vida y por último tenemos a los que tienen el poder que están más preocupados por su seguridad que por cualquier otra cosa y esto no los deja vivir tranquilos.
Aunque estas tres clases sociales son muy diferentes, existe una relación muy fuerte entre ellas y es nada más y nada menos que “Junior” el equipo es esa fuente permanente de felicidad, donde todos de alguna manera se sienten ganadores.
El atlético Junior, es un equipo grande en el torneo nacional y merece seguir siéndolo, por eso la hinchada reclama y con razón que los directivos respeten ese ideal, sin embargo en vez de hacer esto lo que hacen es insultar con vehemencia a la fiel hinchada del equipo de sus amores.
Hay que acotar que no existe nada en contra de Giovanni Hernández, él demostró ser uno de los mejores jugadores del club y por eso se le quiere y respeta como tal, pero otra cosa muy diferente es ser el técnico del onceno tiburón. Por otro lado también hay que decir que existen jugadores poco profesionales en el equipo, ellos deben dar un paso al lado y permitirle a otros con menos nombre, pero con más ganas y disciplina hacer algo por la institución.
Por último recordemos las palabras mágicas de Henry Ford: “Tanto si piensas que puedes, como si piensas que no puedes estás en lo cierto”.
Douglas Blanquicett Rodríguez