
Las dos denuncias por discriminación que tienen en ojo del huracán a colegio
El 15 de febrero, un niño de 6 años fue expulsado del Instituto Las Américas por “mala presentación personal y conducta agresiva”.
Dos denuncias por discriminación a niños menores de 6 años recibió esta semana EL HERALDO, y que involucran al Instituto Las Américas, ubicado en el norte de la ciudad.
La primera la presentó Paula Barrero, madre de un niño de 6 años, quien matriculó a su hijo en el Instituto Las Américas de Barranquilla.
Según ella, después de una semana de clases, el menor fue expulsado por supuesta mala presentación aduciendo que su corte de cabello no era el adecuado para un niño de su edad. Así mismo la madre explicó que la institución le notificó que el menor tenía una conducta inapropiada y agresiva contra sus compañeros de curso.
Según Barrero, al llegar al colegio, las educadoras le manifestaron que el niño no podía seguir en esa institución y que “quedaba expulsado de manera inmediata”.
Barrero dijo que fue citada el 15 de febrero a la institución para una situación que se habría presentado con el estudiante. Le anunciaron, según explicó, que el dinero cancelado por matrícula, pensión y uniformes le sería devuelto.
Bastante dolida por lo ocurrido con su pequeño, manifestó: “En la citación estaba presente un psicólogo que evaluó la presentación personal del pequeño. Este mismo especialista me dijo que mi hijo era grosero y violento”, contó la madre a este medio.
En la misma queja, la mujer entregó fotografías donde se ve al niño golpeado en la cara y la cabeza, y aseguró que días atrás se le presentó orinado, situación que le generó mucha preocupación.
La psicorientadora Shirley Villa le informó a la mamá del niño que 10 padres de familia habían presentado quejas por las agresiones del pequeño y que todos habían pedido retirar a sus hijos por el temor que sentían.
Tras el presunto caso de discriminación, la Secretaría de Educación Distrital aseguró que abrió investigación contra dicho centro educativo para hacer el acompañamiento al menor afectado.
La entidad sostuvo que el colegio privado no reportó ante ellos el caso, como supuestamente lo había asegurado la coordinadora de dicho colegio, Shirley Villa, en entrevista con EL HERALDO. La especialista dijo a este medio que la entidad le había recomendado un “cambio de ambiente escolar”.
“Desde la Secretaría de Educación estamos haciendo acompañamiento al caso presentado entre un menor y la institución educativa del sector privado con el nombre de ‘Las Américas’. Una vez fue reportado el caso, el equipo de Inspección y Vigilancia de esta cartera identificó que no había sido reportado el caso por la institución ante la entidad”, informó la Secretaría.
La cartera de Educación del Distrito precisó que están revisando el proceso realizado por el instituto.
“En este sentido nos encontramos inspeccionando el proceso, con el fin de tomar los correctivos necesarios e iniciar el proceso de acompañamiento del menor y garantizarle el derecho a la educación”.
Otra denuncia sobre presunta discriminación a un menor en el mismo Instituto Las Américas se conoció ayer. Esta vez el caso involucra a un niño de 4 años.
De acuerdo con sus padres, el pequeño tiene trastorno de procesamiento sensorial y baja tolerancia a la frustración, como lo indican certificados médicas.
“Me dirijo al Instituto Las Américas y la entrevista fue maravillosa. Les entrego todos los reportes a su equipo terapéutico y el niño mostró todo su comportamiento en la entrevista psicológica del colegio. Ellos nos manifiestan que nos apoyarían y harían un plan de ajuste y mi compromiso sería que el niño seguiría en sus terapias y que debía entregar los reportes de su proceso con su equipo terapéutico”, contó a EL HERALDO Ramiro Polo, padre del menor.
Relató que posterior a esa entrevista fue citado el 5 de febrero para entregar más información sobre el niño.
“Todo marchaba bien y le compramos sus uniformes y su lista escolar para iniciar clases el 7 de febrero. Ese día todo transcurrió con normalidad y la profesora nos manifestó que había que tener paciencia en el proceso de adaptación del niño”, narró.
No obstante, –según constó el padre– el 8 de febrero recibió una llamada del colegio en la que le pidieron presentarse urgente porque el niño se había mostrado agresivo.
“El 9 de febrero acudimos a la institución y la coordinadora de calidad y la psicorientadora me manifiestan que el niño es extremadamente agresivo y que a raíz de ello tuvieron que atender a 11 padres que llamaron porque tanto niños como maestras estaban atemorizados”.
El niño, según la versión del colegio, trató de tirar una silla. “En esta institución hay cámaras de seguridad y pedí verlas para constatar el hecho y la respuesta fue que no, porque ellos no me habían ofrecido ese servicio y que yo había mentido sobre su condición y que esta institución no era para mi hijo”.
Polo manifestó que la directiva del colegio expresó que no se podía trabajar con el menor porque no soportaba los ruidos fuertes. La familia del menor aseguró que intentaron comunicarse con la rectora de la institución y como no hubo respuesta radicaron queja ante la Secretaría de Educación Distrital.