Los municipios de Piojó, Juan de Acosta, Luruaco y Ponedera no actualizan su base de avalúo catastral desde hace más de 16 años. Los dos primeros en la zona urbana y los restantes en zona rural.
Sara Gálvez, politóloga e investigadora de Fundesarrollo, detalló que en el Atlántico, solo cinco municipios cuentan con las bases de datos catastrales actualizadas, y el resto no lo realizan desde hace 6, 10, 11 o 15 años.
Lo anterior, explica Gálvez, genera un proceso de liquidación ineficiente lo que afecta la disponibilidad de recursos propios para las inversiones que cada municipio necesita de acuerdo a sus características, 'más allá de lo que se plantea desde el nivel central'.
Durante la Jornada de Puertas Abiertas realizada ayer por Fundesarrollo bajo el tema ‘La descentralización fiscal en Colombia y la autonomía fiscal de los municipios del Atlántico - 2015’, también se dio a conocer que hay municipios que tienen dificultades para registrar correctamente el recaudo de alumbrado público porque el concesionario no les brinda la información completa sobre el recaudo.
Esta situación se presenta en Campo de la Cruz, Candelaria, Manatí, Luruaco, Palmar de Varela, Polonuevo, Ponedera, Repelón, Santa Lucía, Suan, Usiacurí, Sabanagrande, Tubará, Juan de Acosta y Malambo.
Descentralización fiscal
Con la investigación. Fundesarrollo busca dibujar el panorama del Atlántico en materia del manejo y ejecución de los ingresos en los municipios.
Durante el espacio, se presentaron los resultados en materia de autonomía fiscal, ingresos tributarios per cápita, efectividad del recaudo del impuesto predial, racionalización de gastos de funcionamiento, autofinanciamiento de la inversión, destino de la inversión e inversión per cápita.
Adriana Restrepo, investigadora de Fundesarrollo, destacó que en Colombia, entre los tipos de ingresos que reciben los municipios, aquellos que provienen de las transferencias (50%) y los ingresos tributarios (28%) son los de mayor peso en el periodo 2000- 2012.
A nivel departamental, se destaca la alta dependencia de las transferencias en la mayoría de los municipios atlanticenses. Sin embargo, también es notorio el avance de municipios para gestionar recursos de otras fuentes como la cofinanciación y regalías, lo que les ha permitido ejecutar proyectos específicos.
Con contadas excepciones, las cifras dan cuenta de la teoría CentroPeriferia la cual explica las desigualdades económicas espaciales: Entre más cerca se esté del centro, el crecimiento económico es mayor.
En este caso, el centro sería Barranquilla. Así las cosas, la mayoría de los municipios que constituyen el sur del Departamento presentan desafíos en el manejo de sus impuestos.
Restrepo asegura que los datos de 2015 reportan que 'mientras, en promedio, los municipios del Área Metropolitana logran recaudar cerca de $475.190 por habitante, los municipios del cono sur registran una quinta parte con $91.700 por persona'.
Entre las excepciones mencionadas se ubican en mejor posición fuera del área metropolitana Tubará, Palmar de Varela, Malambo, Baranoa y Sabanalarga, que logran solventar sus gastos de funcionamiento con recursos propios principalmente, que con transferencias del Gobierno Nacional.
Si los ingresos que provienen de los impuestos se dividen entre el total de habitantes (Ingresos Tributarios per cápita), es notable la disparidad de ingresos disponibles por persona. En 2015 Puerto Colombia, seguida de Barranquilla, cuenta con un Ingreso Tributario per cápita de $1.238.785, mientras que en Ponedera la cifra no supera los $18.000. En la mayoría los municipios, los números no sobrepasan los $200.000.
Soledad, que es el séptimo municipio más poblado del país, no alcanza a recaudar lo que en promedio recaudan los municipios de menos de 10.000 habitantes en Colombia. Restrepo destaca que 'las disparidades en términos de recaudo demuestran aquellas que se dan en el desarrollo económico del territorio'.
En cuanto a la efectividad del recaudo del predial, que corresponde a lo recaudado frente al valor total del avalúo catastral de todo el municipio, las cifras presentan baja efectividad. Solo siete municipios recaudan dentro del rango mínimo estipulado por el Estatuto Tributario: Puerto Colombia, Barranquilla, Galapa, Malambo, Sabanagrande, Sabanalarga y Ponedera.
Sobre la ejecución de Ingresos corrientes de Libre Destinación, aquellos recursos que pueden ser gastados en inversión, gastos de funcionamiento o ponerlos al servicio de la deuda, los municipios con pocos ingresos propios de libre destinación tienen baja autonomía y discrecionalidad de inversión.
En su mayoría, estos ingresos se destinan a gastos de funcionamiento y deuda.
Solo Barranquilla, Puerto Colombia, Juan de Acosta y Sabanalarga presentan mayor autofinanciamiento de la inversión, es decir, son mayores los recursos que se destinan a invertir en el municipio.
De hecho, solo Barranquilla, Puerto Colombia y Malambo presentan cifras de mayor destinación a invertir en el ámbito educativo.
Lo anterior obedece, principalmente, a la certificación, es decir: el acto administrativo que reconoce a los municipios y distritos aptos para administrar los recursos del Sistema General de Participaciones.