
Los asentamientos en Mallorquín han crecido 40 %, según Distrito
Una caracterización realizada en 2019 contabilizó 39 familias ocupantes, pero en el último conteo había aumentado. Distrito avanza con la socialización del proyecto del ecoparque.
La Ciénaga de Mallorquín, el “principal” tesoro ambiental de Barranquilla, se transformará. Desde la administración distrital se lidera un “ambicioso” proyecto para realizar intervención de orden ambiental, social y turístico en este punto estratégico de la ciudad.
Esta megaobra impactará directamente a las familias asentadas en las zonas aledañas a la ciénaga, que esperan que la iniciativa no solo traiga desarrollo turístico para la ciudad, sino que les permita acceder a programas de vivienda digna, salud, educación y empleo.
En varias oportunidades se han opuesto al desalojo de la zona aduciendo falta de garantías para acceder a dichos beneficios; por esa razón, uno de los puntos clave para el éxito de esta iniciativa es la socialización del proyecto, con el fin de concientizar a la comunidad sobre la importancia de contar con un “gran bioparque” y destacar los beneficios medioambientales para la ciudad.
En medio de este proceso, las autoridades han adelantado un trabajo con los distintos actores de la comunidad que serán impactados con la obra. Pescadores, las personas que manejan el tren turístico, habitantes y trabajadores en los sectores de La Playa y Las Flores han participado en el mismo.
“Estamos tratando de involucrarlos para que las personas que han vivido cerca a la ciénaga o de este ecosistema, y han padecido, puedan ser los que se beneficien ahora en conjunto. Estamos trabajando con ellos para profesionalizarlos, para involucrarlos y para unirlos, pero cabe anotar que estamos trabajando sobre un censo previamente establecido”, dijo recientemente el alcalde Jaime Pumarejo.
Un equipo periodístico de EL HERALDO acompañó una de las jornadas de socialización que la administración distrital realizó con ciudadanos para explicar los beneficios que este macroproyecto trae para la ciudad.
Dimas Caraballo, líder del barrio Las Flores, expresó su satisfacción por el desarrollo del proyecto del Ecoparque de Mallorquín, ya que —según sus palabras— las administraciones anteriores tenían una “deuda histórica” con la comunidad del barrio Las Flores y con Barranquilla.
“Este proyecto conlleva un reconocimiento de un cuerpo de agua como Mallorquín y a la única playa que tiene Barranquilla que es Puerto Mocho”, dijo.
Agregó que este es un reconocimiento a la comunidad que ha venido forjándose de líderes que de una u otra forma han mostrado pujanza para exaltar lo que han venido desarrollando en esta zona.
Indicó, además, que la problemática de ocupación irregular de algunos sectores ha complicado el proceso de socialización de las obras, puesto que “hay personas que de mala fe pretenden obtener derechos y beneficios”.
Sin embargo, fue enfático al sostener que “todo aquel que está en el proceso desde sus inicios accederá a ofertas institucionales variadas, siempre pretendiendo no alterar la armonía del entorno y respetando sus derechos”.
En la más reciente caracterización en el sector de Puerto Mocho, contiguo al barrio Las Flores, gestión que viene adelantando desde 2019 la Alcaldía de Barranquilla, en acompañamiento de la Dimar y Capitanía de Puerto, se logró establecer una variación en la población de la zona con una tendencia al crecimiento de un 40 % desde que empezaron los censos.
De acuerdo con información de la administración distrital, dicho conteo se ha realizado en tres oportunidades para determinar el número de habitantes y las actividades económicas que ejercen, con relación a los proyectos que se plantean en la recuperación de la zona y de la Ciénaga de Mallorquín.
En ese sentido, la Alcaldía determinó que en el sector de Puerto Mocho para el 2019 había 39 familias ocupantes y en octubre de 2021, que fue cuando se realizó el último conteo, ya había 102. Esta cifra, según los estudios, podría seguir aumentando.
El área técnica y de socialización de la Secretaría Distrital de Control Urbano y Espacio Público viene desarrollando el proceso de levantamiento de información y caracterización de las familias ocupantes. Este ejercicio no es un censo, pero se hace con el fin de conocer la población y sus necesidades.
La entidad señaló que la actividad de conteo se ha realizado en varias oportunidades, inclusive diferentes horarios y generalmente en apoyo de otras dependencias.
Dicho proceso permitirá establecer la escolaridad, edad y actividad económica, entre otros tantos datos, lo que posibilita la socialización —con otras dependencias— de la información de la población y sus necesidades. El objetivo es dar traslado de la oferta institucional a estas personas.

La Secretaría de Control Urbano informó que durante este ejercicio las ocupaciones de estos predios han continuado, pese a que se les ha advertido sobre el porqué no deben estar en el lugar.
“En algunos casos se han ordenado recuperaciones y se ha sugerido abstenerse de realizar mejoras en las ocupaciones, pero sobre todas ellas se han realizado procesos de socialización de cómo está contemplado desarrollar el proyecto y las posibilidades que le van a traer a cada uno”, puntualizó.
La Secretaría detalló que esta caracterización se hace para establecer qué población es susceptible de obtener mobiliarios de trabajo dentro del Ecoparque Ciénaga Mallorquín.
“Es claro que todos no podrán contar con espacios fijos de trabajo, es decir, con locales o mobiliarios. Sin embargo la demografía de la población nos ha permitido establecer posibles ofertas laborales o alternativas de actividades económicas que después de generado el ordenamiento de playa podrán ser una realidad en el sector y dentro del proyecto”, indicó.
Todas las socializaciones se han realizado en acompañamiento de la Secretaría de Desarrollo Económico —dentro del marco de sus programas de empleabilidad, formación e inclusión productiva—, pues el proyecto cuenta con espacios que permitirán hacer este tipo de ofertas a la población que se encuentra en edad productiva.
La cartera de Desarrollo Económico, por su parte, sostuvo que la caracterización no solo está planteada para las necesidades de empleabilidad, sino también para el ofrecimiento de las necesidades básicas en salud, educación y formación, entre otras.
De acuerdo con la zonificación y ubicación, el sector donde se encuentra el mayor número de familias asentadas es en La Querella, con un total de 37.
