Cada uno de ellos recibió una pena de diez años 'fomento de la impureza y la indecencia, montaje y colusión contra la seguridad nacional y propaganda contra el régimen', según Tribunal Revolucionario de Teherán.
La influencer y comunicadora asegura que no está detrás de ningún procedimiento ilegal y su contratación ha sido transparente.
Los influencers se encontraban en un concierto de fin de año.
Funcionarios por establecer habrían ordenado el pago de $150 millones a siete influenciadores de las redes.
Que las redes sociales existan no es el problema. El problema es cómo las usamos y para qué lo hacemos. Qué ganamos consumiendo cierto tipo de información. Y qué perdemos mientras el tiempo se nos va saltando de una historia a otra. El hambre de poder se ha traducido hoy en el hambre de seguidores y likes. Hacer que nos vean es el Santo Grial de nuestro tiempo. Y ese tampoco es el problema, sino que el precio que paguemos sea tan alto como perder nuestra intimidad.