'Si por poner las urnas para la autodeterminación nos condenan a cien años de cárcel, la respuesta es clara: deberán volverse a poner urnas para la autodeterminación', dijo Quim Torra.
La movilización tendrá su punto culminante el viernes, cuando confluyan en Barcelona cinco marchas procedentes de otras tantas ciudades catalanas, coincidiendo con una concentración multitudinaria y una huelga general.
'Si por poner las urnas para la autodeterminación nos condenan a cien años de cárcel, la respuesta es clara: deberán volverse a poner urnas para la autodeterminación', dijo Quim Torra.
La situación estalló cuando cientos de personas, muchos con la cara tapada, lanzaron objetos contra el cordón policial que protegía el edificio.
En total, 40.000 personas participaron en la manifestación de Barcelona antes de que estallaran los enfrentamientos entre varios centenares de manifestantes, algunos de ellos con el rostro cubierto, y policías, que los dispersaron a la fuerza.