Científicos crearon dos embriones de la especie casi extinta. Quedan dos hembras. El último macho falleció en 2018.
Ecologistas instan a que México reciba advertencias. Solo quedarían diez ejemplares de este pequeño cetáceo.
'Hemos conseguido extraer un total de 10 ovocitos, lo que muestra que las dos hembras siguen produciendo ovocitos y pueden ayudarnos a salvar a estas magníficas criaturas', dijo el profesor Thomas Hildebrandt en Berlín.
Su hábitat se ha fragmentado y reducido cada vez más, mientras algunos siguen matándolas por sus huesos y cerebro, considerados como remedios para el sida, o sus colas.