
El artista que lleva el dolor del mar al lienzo
Bolsas plásticas y alambres son algunos objetos que se pueden apreciar en las pinturas y que pareciera que pueden ser alcanzados por los espectadores.
“Mi vida siempre ha estado conectada al océano. Con él crecí y lo llevo a todas partes, por eso busco que la gente lo valore y lo cuide”, dijo a EL HERALDO Rubén Darío Terán Gámez, un artista barranquillero que ha logrado llevar el dolor más profundo del mar a la superficie de grandes escenarios de exposición.
Sus obras pretenden ser un vehículo para amar y cuidar del medioambiente, que no solo es la fuente de inspiración de sus pinturas, sino también el hogar de cientos de especies que están padeciendo la inconsciencia del ser humano, que a diario arroja sus desechos al océano.
Por ello, las pinturas de Rubén, creadas en acrílico sobre lienzo, parecen reflejar el dolor infinito del mar inundado de basura, pero escondido bajo una explosión de colores y la belleza de sus pinceladas.

También denotan el pasado de un joven que ha querido salir adelante y superar los estigmas de una sociedad que no comprende el valor del trabajo de los pequeños artistas.
“Quiero que otros artistas sepan que no deben rendirse; que si bien abrirse camino no es fácil, debemos enfocarnos en hacer esas cosas que realmente nos impulsan a levantarnos de la cama y nos hacen sentir pasión”, menciona.
Según él, no hay nada mejor que el arte para cambiar vidas y mucho más si los esfuerzos se unen para proteger al medio ambiente y cada criatura que habita en el mar.
“Mis obras, además, son diseñadas con objetos que se encuentran en el fondo del océano, como bolsas plásticas y alambres. Todos nocivos para la fauna y la flora”.

Llama la atención que Rubén utiliza una técnica que hace ver los objetos en dimensión 3D y pareciera que pudieran sacarse del lienzo.
Y es que con 25 años, el barranquillero pasó por la Escuela Distrital de Arte y en 2017 obtuvo el primer puesto en la categoría de Pintura del V Salón de Artistas Jóvenes Uninorte, con su obra Huella de carbono.

Además, su trabajo Belleza Letal también fue seleccionado para el III Salón distrital de Artistas Plásticos y Visuales convocado por el Distrito en 2018, lo que se suma a las cinco exposiciones individuales y 25 colectivas en las que ha participado, algunas de ellas en lugares como Miami, Perú, La Habana y Panamá.
Pulpos, peces, tortugas y medusas se pueden apreciar en las pinturas. “Las veo como algo lúdico, que incluso me recuerda a mi infancia, donde era feliz jugando con cualquier objeto”.