Hacer periodismo económico fue lo que siempre le apasionó al barranquillero Luis Emilio Rada Conrado, una labor que inició el 4 de febrero de 1984 con su programa radial Radar económico, que se emitió por la emisora La Voz de la Patria.
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Sin embargo, en aquel entonces hacer este tipo de programas era toda una aventura quijotesca, debido a que el periodismo deportivo era el que “mandaba la parada”. Pero Rada Conrado le apostó a un ejercicio distinto y terminó convertido en toda una institución del periodismo económico.
Hoy sus familiares, colegas y oyentes lamentan su partida, la cual ocurrió la noche de este sábado debido a varias complicaciones de salud que tuvo que afrontar durante los últimos años. Su hermana Mabel Rada, fue la encargada de confirmar el deceso del creador del informativo económico más longevo de la costa.
Luis Emilio empezó con un espacio los domingos a las 7:00 a.m. en La Voz de la Patria, y con persistencia logró que le concedieran también ese mismo horario el sábado. De esta manera, Radar Económico con el tiempo se convirtió en un referente informativo a nivel nacional que supo adaptarse a los nuevos tiempos con presencia virtual, incluyendo un blog de noticias.
Egresado de la Universidad Autónoma del Caribe, Rada Conrado también fue miembro fundador de la Asociación de Comunicadores Sociales del Atlántico (ACSA), organización desde la cual impulsó procesos de formación para jóvenes periodistas. Muchos de los comunicadores económicos actuales reconocen en él al maestro que les mostró el camino y les enseñó a interpretar cifras con sentido humano. Igualmente estudió Derecho.
El periodista especializado en cubrir la fuente de Economía, Jorge Montaño destacó su transparencia. “Su honestidad fue la clave y se resume en la siguiente frase: la honestidad es la columna vertebral de las cosas en la vida. Es vital en el periodismo. Si no se es honesto no se debería ejercer el periodismo”.
Cubrió grandes eventos
‘Lura’, como era también conocido por su nombre y apellido, participó con su padre y hermanos en el ámbito empresarial en un negocio en el Centro, pero la pasión por el periodismo, lo llevó a incursionar en el plano internacional cubriendo las asambleas del Fondo Monetaerio Internacional (FMI), del Banco Mundial (BM) y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Montaño que cubrió la fuente de Economía durante 18 años en EL HERALDO, destacó que: “Para un periodista independiente como Luis Emilio no fue nada fácil lograr el acompañamiento comercial para ir a esos eventos internacionales, pero lo consiguió gracias a su conocimiento, perseverancia y la forma en que escribía y leía las notas económicas en sus programas diarios”.
Por su parte, el experimentado periodista radial Henry Forero aseguró que Luis Emilio fue el primer periodista costeño que comenzó a viajar, a cubrir los principales eventos económicos del mundo. “Con él viajamos a Europa, Asia, Estados Unidos, Centroamérica y Suramérica. Tenía muy buenas relaciones públicas a nivel internacional. Fue un hombre que se ganó el respeto de todos por su objetividad, sencillez, disciplina y responsabilidad”.
A su turno Adriana Vásquez, jefe de prensa de la Cámara de Comercio de Barranquilla le dijo a esta casa editorial que su profesionalismo, su mirada aguda para contar las historias detrás de los números y su compromiso con la verdad dejaron una huella profunda. “Luis Emilio fue más que un colega: fue un amigo leal y un gran consejero de vida. Siempre encontró las palabras justas para inspirar, orientar y recordar que, detrás de cada reto, hay una oportunidad de crecer”.
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Finalmente, la comunicadora Diana Buendía, recordó con especial cariño el año 2004, cuando la animó a lanzar su propio programa radial. “Me llenó de entusiasmo, confianza y buena energía. Incluso, iniciamos juntos el proyecto de Revista D’Notas en Riomar de Todelar. Durante varios meses compartimos micrófonos, hasta que un día me dijo, con esa generosidad que lo caracterizaba: ‘Ya estás lista, ahora puedes tomar el timón de tu barco’. Ese gesto de mentor y amigo, es algo que siempre llevaré en el corazón”.