
Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo: lo que hay que saber
Sobre esta condición aún hay poca información y esto afecta tanto a niños como a padres, quienes suelen constantemente ser juzgados por el comportamiento de los pequeños en sitios públicos.
Este 2 de abril se celebra el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, con el objetivo de dar a conocer de qué se trata esta condición, cómo identificarla, tratarla y además educar a la sociedad para ser incluyentes con respecto a este trastorno.
Pero lo que sabemos del autismo no es mucho. Incluso se ha evidenciado que, aunque ha crecido mucho la concienciación, aún se desconoce mucho sobre esta condición.
El Trastorno de Espectro Autista afecta el desarrollo mental de los niños, creando dificultades principalmente en la comunicación e interacción social. No se sabe aún con certeza el origen o la causa para esta condición, que no es una enfermedad, por lo cual no tiene cura.
El autismo también se caracteriza por tener conductas repetitivas y estereotipadas, incomodidad extrema con ciertos ruidos o texturas.
Las personas con autismo tienen una forma diferente de percibir el mundo, haciendo que su enfoque sea dirigido a otros elementos del entorno que no son necesariamente estímulos sociales presentes.
Hay que destacar que dentro del Autismo se encuentran diferencias. Cada niño con TEA se manifiesta de forma distinta.
La identificación y diagnóstico temprano de esta condición ayudan, no solo al niño y padres, para poder tratarla. También se trata de orientar a la sociedad para que pueda ser capaz de saber cómo reaccionar cuándo se cruce con una persona con TEA en cualquier lugar.
Hay alarmas tempranas que suelen tener los niños que debemos tener en cuenta: falta de expresiones como sonrisa o alegría con otras personas, falta de intercambio de sonidos, no responder por el nombre, no balbucear o vocalizar cuando ya lo debería hacer, no señalar, alcanzar, mostrar o saludar con la mano, molestias producidas por ruidos o texturas, son algunas de ellas.
Lo más recomendable, luego de notar alguna de las señales, es llevar al menor a un médico pediatra.
Es importante resaltar que, ante las diferencias de cada uno de los casos, no todos los niños autistas son no verbales, cada uno debe ser tratado de manera individual según sus características.
Comúnmente, los niños con autismo y sus padres son estigmatizados. Es frecuente ver personas juzgando a los papás de los niños por no “atender” a sus hijos o por no darle una “buena educación”, sobre todo por el tipo de comportamiento de los infantes en sitios públicos.
Evitar los prejuicios es clave para evitar cualquier inconveniente. Por eso se debe ampliar la educación y la cantidad de campañas para seguir dando a conocer de qué se trata la condición y cómo enfrentarla.
Una de las formas de marcar la diferencia con respecto al comportamiento es, luego de identificar las conductas, mantenerse empático y evitar malos comentarios.
Incluir a los niños y sus padres en actividades, con condiciones que puedan ayudarlos, es esencial para evitar ser excluidos del ambiente común.
“Todos los autistas son genios”, totalmente falso. Hay personas con autismo que logran desarrollar más que otras un talento o capacidad. El autismo no es sinónimo de superinteligencia.
“El autismo el culpa de los padres o la educación que le dan”, falso. La crianza de los padres no es una causa del autismo.
“Quieren justificar el mal comportamiento diciendo que tiene autismo”. El autismo no es una excusa por la conducta del niño ni es una elección. Los diagnosticados con TEA procesan de forma diferente la información. Se necesita que se les apoye y no que se les juzgue.