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Graves acusaciones lanzó el presidente Gustavo Petro en contra de los magistrados del Consejo Nacional Electoral luego de que este órgano formulara cargos en su contra y su campaña por supuestas violaciones de topes.

El mandatario señaló al presidente del CNE, César Augusto Lorduy, de estar involucrado en un supuesto feminicidio. “El señor Lorduy ha sido vinculado a casos graves, como el asesinato de una novia que tenía (...) Estos son los personajes que están tomando decisiones sobre el voto popular”, aseveró.

Al mismo tiempo, el jefe de Estado arremetió en contra de la magistrada Maritza Martínez por haber estado casada con un “ex jefe paramilitar”.

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“La señora Maritza, hasta hace poco, no sé si aún, era la esposa de un señor paramilitar condenado o procesado, que era jefe político del Meta”, aseguró.

César Lorduy y Maritza Martínez se defienden

A través de un comunicado, la magistrada Martínez aseguró que se trata de una “campaña de desprestigio” del presidente Petro en su contra, la cual “lesiona gravemente mi buen nombre, honra y reputación como la de mi cónyuge”.

“Las sugestivas, imprecisas y falsas acusaciones, de las que hacen eco los subalternos y seguidores del jefe de Estado dejan expuesta la seguridad e integridad física mía y de mi familia”.

Así mismo, en diálogo con Blu Radio señaló: “Lo primero que tengo que decir es que no quisiera entrar en controversias con el presidente, a quien siempre me referiré con respeto, porque representa la institucionalidad”.

Sin embargo, explicó que su esposo “fue investigado porque cuando era gobernador tuvo que enfrentarse de manera frontal a los grupos paramilitares que intentaban acceder a los espacios políticos” y aseveró que la investigación nunca prosperó.

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“Jamás tuvo una medida de aseguramiento. Yo estaría casi en condición de decir que nunca pasó de una preliminar”, señaló.

Por su parte, el magistrado Lorduy aseguró que él no tuvo que ver con el asesinato de la mujer.

“Debo aclararle al doctor Gustavo Petro que esa persona no era mi novia, era una compañera de trabajo. Debo decirle al doctor Gustavo Petro que el proceso continuó con relación a otras personas vinculadas y esa investigación, posteriormente por razones de términos, prescribió, pero en lo que respecta a César Lorduy, fui objeto de un sobreseimiento definitivo y por tanto nunca fui acusado, nunca fui sancionado, y nunca fui condenado”, indicó, añadiendo que esto ocurrió hace más de 50 años.

De acuerdo con su explicación, se trató de “un accidente” en el que el arma se disparó accidentalmente, tal como se demostró judicialmente”.

“Ese hecho que mencionó el doctor Gustavo Petro generó a mi favor un sobreseimiento definitivo, que significa que no se encontraron elementos probatorios que permitieran confirmar, ni siquiera inferir, que yo hubiera participado en eso”, puntualizó.