
La multinacional Drummond empezó a enviar a sus casas a unos dos mil trabajadores del área de producción en las minas del Cesar, argumentando motivos de fuerza mayor, tras el traumatismo que ha generado la parálisis del transporte del carbón hasta los puertos de Santa Marta y Ciénaga.
La situación se registra por el cese de actividades que se mantiene en Ferrocarriles del Norte de Colombia, Fenoco, cuyos empleados se fueron a huelga al no llegar a acuerdo para el mejoramiento de sus condiciones laborales.
El Sindicato Nacional de la Industria Minera, Petroquímica, Agrocombustibles y Energética, Sintramienergética, informó que son dos mil trabajadores que se irán a sus hogares con un futuro incierto y sin salarios.
“La organización sindical presentó a la empresa unas propuestas para minimizar el impacto que generaría esta decisión de enviar a los trabajadores a vacaciones colectivas mientras se definía el conflicto de los compañeros afiliados a Sintraime que prestan sus servicios laborales a la empresa Fenoco”.
El presidente seccional de Sintramienergética, Luis Manuel Mendoza, señaló que la compañía hizo la solicitud al Ministerio de Trabajo para que todos los empleados contratados fueran licenciados.
El sindicato calificó la determinación de la compañía como una estrategia calculada para violar los derechos laborales y convencionales en Colombia.
La organización sindical hizo un llamado al presidente Juan Manuel Santos para que se haga presente en este conflicto.
“Estas empresas están llevando este movimiento a lo máximo, a costa de los trabajadores para que el precio a nivel mundial en el mercado del carbón se coloque en un lugar muy alto y así sus ganancias se vean reflejadas en los próximos meses”, puntualizó.
Por Miguel Barrios
Valledupar.