La Corporación Autónoma Regional del Magdalena, Corpamag, en alianza con ProCAT Colombia, instalaron en la Sierra Nevada de Santa Marta 80 nidos artificiales, con el fin de favorecer el proceso reproductivo del Loro Serrano, una especie de ave catalogada por la UICN en peligro de extinción.
Lea: El pueblo Arhuaco recupera su salida ancestral al mar con la entrega de Los Acantilados
La actividad es parte de una estrategia de conservación de especies endémicas y en estado de amenaza, y se ha concentrado en la Estrella Hídrica de San Lorenzo y en el corregimiento de San Pedro, dos áreas estratégicas del Macizo Intertropical.
La iniciativa se enmarca dentro del convenio suscrito entre Corpamag y ProCAT Colombia, y contempla la instalación de los nidos en las palmas de cera, una especie de planta estratégica para la reproducción de esta ave endémica.
“El Loro Serrano ha sido afectado por la deforestación de la palma de cera para usos religiosos en Semana Santa, el tráfico ilegal y la competencia de otras especies de loros por sus nidos”, explicó Corpamag en un comunicado.
Lea: Los Pachencas y el Clan del Golfo tienen sitiadas a las comunidades de la Sierra Nevada
Añade el reporte que “a diferencia de otros loros, el Serrano tiene plumaje verde y rojo en el pecho y en la cola. Además, es más pequeño que el Loro Real y más grande que los comunes”.
Los nidos artificiales
Los nidos han sido diseñados con la ayuda de expertos locales, nacionales e internacionales, con especificaciones técnicas que responden a las necesidades de la especie y a los desafíos del entorno.
Están elaborados en PVC y en madera resistente, con un orificio en la parte superior, cuyas medidas exactas impiden el ingreso de especies más grandes que podrían ocupar el espacio o interrumpir el ciclo reproductivo.
Lea: Mujer fue condenada en Santa Marta tras ahogar a su bebé de 15 meses
El orificio está reforzado con un aro metálico, que evita que sea destruido por el pico del ave, garantizando así la durabilidad del refugio.
Cada nido cuenta con una puerta inferior que facilita el monitoreo técnico del proceso reproductivo, permitiendo observar el estado de los huevos, el nacimiento de los pichones y hacer seguimiento a su desarrollo y supervivencia.
Como medida adicional de protección, el interior de los nidos ha sido tratado con un repelente natural que evita la invasión de avispas o abejas, asegurando un espacio libre de amenazas para los futuros polluelos.
“La idea es que el Loro utilice esos nidos mientras avanzamos en una estrategia de restauración, pues hay poca disponibilidad de palmas de cera”, comentó Diego Zárate, director ejecutivo de ProCAT Colombia.
