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La normalidad empieza a regresar a la Clínica Materno Infantil Adela de Char, en el municipio de Soledad. Luego de una reunión entre la Gerencia y el grupo de médicos que había presentado su renuncia, se logró un acuerdo para que regresen a sus puestos de trabajos y reabrir los servicios de urgencias.

Leonela Barraza, gerente Operacional de la Fundación Clínica Materno Infantil Adela de Char, informó que se sostuvo una reunión hasta altas horas de la noche del martes para establecer las garantías que el personal médico requería para regresar a sus labores.

'Ellos están llenos de temor por la situación que se está presentando. Ya pudimos establecer un acuerdo con la Policía Nacional para que una patrulla esté durante las 24 horas en la institución y poder brindar seguridad a todo el personal', sostuvo Barraza.

La gerente de la clínica también explicó que si bien tenían conocimiento del descontento de algunos pacientes con los protocolos utilizados para atender a pacientes con sospecha de COVID-19, desconocían de amenazas al personal médico hasta el caso del médico José Julián Buelvas.

Indicó que se ha contemplado la puesta en marcha de un protocolo de seguridad más estricto, teniendo en cuenta que la comunidad no ha tomado conciencia de la situación que se vive a nivel mundial.

'Muchas personas no han logrado entender la situación que nos encontramos, estamos en el pico máximo. Aunque sea difícil, estamos prestos para seguir atendiendo y explicar las decisiones que se toman con la atención de los pacientes', ratificó.

A su turno, los médicos indicaron que tomaron la decisión de regresar a sus puestos de trabajo ante la necesidad de la comunidad en medio de esta crisis sanitaria: 'Es una población que requiere de nuestra labor, nos nace darle apoyo a esta zona tan necesitada a pesar de la presión que tenemos normalmente'.