En video | Conductores borrachos pagarían hasta $42 millones de multa
Este año ha incrementado un 30% el número de carros inmovilizados por conductores ebrios. En el Carnaval habrá 300 policías de tránsito en calles.
Conducir después de tomarse un par de cervezas durante este carnaval le puede dejar un tremendo dolor de cabeza. No por el guayabo del día después, sino porque puede terminar pagando hasta $42 millones si lo encuentran al volante con alcohol en su cuerpo.
Tal irresponsabilidad vial se ha convertido en uno de los grandes temores para aquellos que salen a las calles a festejar las carnestolendas, pues no es extraño encontrarse con incidentes –unos más graves que otros– generados por combinar el alcohol y los motores.
Es por eso que con el objetivo de reducir la accidentalidad y dar tranquilidad a locales y turistas que por estos días se encuentran en Barranquilla las autoridades han aumentado la presencia en las calles, haciendo controles que dejan algunos resultados, entre ellos el aumento de los vehículos inmovilizados porque sus conductores registraron algún grado de alcohol.
EL HERALDO conoció que en lo corrido de este año se han inmovilizado 163 vehículos por alcoholemia, lo cual representa un incremento del 30% en comparación con los 125 que fueron inmovilizados en la misma época, pero de 2019; y eso que aún el Carnaval 2020 no ha comenzado en firme.
De hecho, fue el alcohol el que dio pie para que se generara un curioso –y molesto para algunos– accidente en el que estuvo involucrado el conductor de una Dacia, un policía y una transeúnte.
El hecho ocurrió en la mañana de este martes cuando un patrullero de la Policía decidió inmovilizar el vehículo dedicado al transporte ilegal de pasajeros, debido a que su conductor, al parecer, tenía grado dos de embriaguez.
Inesperadamente, cuando el policía arrancó el vehículo para conducirlo a los patios, atropelló sin querer a una mujer.

En las calles
A raíz de este caso y de otros accidentes menores que involucran conductores ebrios y que se han registrado por estos días en el área metropolitana de Barranquilla, EL HERALDO salió a las calles para conocer qué tan enterados están los barranquilleros de las sanciones que acarrea el conducir en estado de embriaguez.
Carolina Rolong, quien conduce un automóvil, aseguró que en el carnaval suele ingerir bebidas alcohólicas si se presenta la ocasión, pero que en caso de hacerlo casi siempre sale sin carro o le pide a otra persona que conduzca; sin embargo, desconoce cuáles son las sanciones por alcoholemia.
“Hay que evitar molestias, pero no sé qué pasa si uno lo hace. Me imagino que deben haber multas o hasta cárcel, dependiendo de lo que haga, pero no conozco la ley exacta”, confesó Carolina.
Por su parte, el mototaxista Nelson Mazo dijo que normalmente consume alcohol en las fiestas, pero lo hace con moderación.
“Si estamos en plan de recochar o tomar en carnaval, dejo siempre el vehículo en la casa guardado para tener más seguridad y no causar un accidente, porque en moto el chasís es el cuerpo de uno”, explicó el conductor, quien afirma que tiene “idea” de las sanciones.
“Tengo entendido que con una cerveza o un trago de whisky enseguida viene la infracción alta, por eso es mejor no tomar manejando”, aseguró Mazo.
Clíder Acuña, quien conduce un taxi, aseguró que no piensa consumir bebidas alcohólicas en carnaval porque “las nuevas normas de tránsito hacen más difícil conducir embriagados, pues la multa es bien grande¨.
“Además, no quiero llevar a cuestas la muerte de otra persona”, destacó Acuña.
Así funciona. La ley 1696 de 2013, “por medio de la cual se dictan disposiciones penales y administrativas para sancionar la conducción bajo el influjo del alcohol u otras sustancias psicoactivas”, deja muy en claro las consecuencias de conducir ebrio.
Según la norma, de resultar con un grado cero de embriaguez (una cerveza o una copa de vino), por primera vez, derivará en una multa de $2.633.400, trabajo comunitario por 20 horas, suspensión de la licencia de conducir por un año y la inmovilización del vehículo por un día.
La anterior es apenas la sanción más baja, pues de hallarse un conductor en grado tres de alcoholemia (ocho cervezas o más de tres tragos de ron o whisky) resultaría en una multa de $21.067.300, la suspensión de la licencia de conducción por 10 años y la inmovilización del vehículo por 10 días.
Pero ojo, si el conductor es reincidente puede llegar a tener que pagar hasta $42.134.500 pesos y quedar sin licencia de por vida.

Recomendaciones
Para evitar conductores ebrios en las calles que generen accidentes, durante los cuatro días de Carnaval habrá aproximadamente 300 efectivos de la Policía de Tránsito en las calles y 150 orientadores de la Secretaría de Movilidad haciendo trabajo de orientación, prevención y control en toda la ciudad de Barranquilla.
El coronel Jhon Mirque, comandante de la seccional de Tránsito de la Policía Mebar, recomendó a los ciudadanos que eviten irrespetar las normas de tránsito durante las fiestas para ahorrarse multas y sanciones.
“Si van a conducir, no lo hagan bajo efectos del alcohol ni de sustancias alucinógenas; y si lo van a hacer, entreguen las llaves. Respeten y acaten las normas de tránsito, no excedan los límites de velocidad y, por supuesto, disfruten este Carnaval en paz”, dijo el coronel.
Cabe destacar que, según la Ley, si un conductor se niega a realizar la prueba de alcoholemia ante el requerimiento de un policía tiene una sanción de $42.134.500.
Además, quien cause lesiones u homicidios en accidente de tránsito y se demuestre que actuó bajo cualquiera de los estados de embriaguez de que trata la Ley, o que injustificadamente abandone el lugar de los hechos, además de las sanciones previstas en el Código Penal, se le suspenderá automáticamente su licencia por de cinco años.
