El año no empezó del todo bien para la Fiscalía General de la Nación. El pasado 28 de febrero el Consejo de Estado anuló la elección de Viviane Morales, al considerar que se presentaron vicios de fondo en la votación en la Corte Suprema de Justicia.
El pasado viernes estalló otro escándalo. Esta vez en la Unidad Nacional Antimafia, en la que siete fiscales denunciaron presuntas presiones de la jefa de ese grupo investigativo, en lo que sería un escándalo al interior del órgano acusador.
El propio fiscal general, Eduardo Montealegre Lynett, pidió al Consejo Superior de la Judicatura una investigación respecto de lo denunciado.
Pero si a nivel nacional llueve, por Barranquilla no escampa. Esta semana, algunos funcionarios del CTI tanto de la Fiscalía Seccional denunciaron situaciones que están ocasionando trauma institucional y laboral, como consecuencia, según ellos, de los estilos impuestos, tanto por la directora del CTI y por el director de Fiscalías.
En permanente riesgo. Una de las condiciones que más preocupa a los trabajadores de la Fiscalía es el elevado riesgo al que están expuestos diariamente, debido a que, según ellos, la gran mayoría no tiene armamento asignado, así como tampoco elementos de protección como chalecos antibalas.
“Un claro ejemplo es el de los funcionarios que llegaron del liquidado DAS; ellos desempeñaban labores que según la ley son idénticas y por eso homologaron los cargos, pero no les han dado armamento ni chalecos antibalas,”, señaló uno de los funcionarios.
Nelson Cantillo Villamizar, presidente nacional de Asonal Judicial, indicó que “además de la sobrecarga de trabajo está la inseguridad, porque hay audiencias que terminan a las 10 o 12 de la noche, sin que al juez, fiscal o a los servidores se les proporcione seguridad”.
Asimismo indicó que si bien los funcionarios del DAS aparentemente llegaron a reforzar el trabajo del CTI, también lo es el hecho de que la carga laboral aumentó por la desaparición del ente judicial.
Cantillo Villamizar asegura que la cantidad de trabajo que se les asigna a los investigadores ha generado una costumbre poca sana, que en últimas perjudica a las víctimas, ya que los investigadores se esfuerzan más por hallar la forma de cerrar o archivar los casos cuanto antes posible, que por realmente esclarecer los hechos. “Estas políticas implementadas no son contra la impunidad, son de producción y producción sin calidad es impunidad”, indicó el presidente de Asonal Judicial.
Mientras que en ciudades como Cali y Medellín los investigadores judiciales y fiscales llevan en promedio de 300 a 500 carpetas de diferentes procesos, los fiscales e investigadores judiciales en Barranquilla llevan un promedio de mil carpetas o procesos.
Esa situación tiene con mucho malestar a los servidores judiciales, ya que afirman que lo que hace falta es que se aumente la planta de personal para poder evacuar todas esas investigaciones.
Igualmente indicaron que al no haber servicio de URI en Soledad, uno de los municipios más peligrosos del país, cerca de 600 mil personas están careciendo de ese servicio, lo que para ellos y Asonal Judicial es un verdadero escándalo, y ello obedece, según denunciaron, a las políticas de improvisación del director seccional de Fiscalías.
Más denuncias. Nelson cantillo señaló que aunado a las anteriores denuncias existe un permanente acoso laboral y un maltrato que ocasiona violación a los derechos humanos.
“Existe un ambiente hostil, de persecución que no es el más apropiado para prestar una actividad de tanto riesgo y responsabilidad como le corresponde a los investigadores judiciales”.
“Tal es el caso de nuestro amigo y compañero Manuel Steif, a quien le decíamos de cariño Pachequito; en su suicidio no podemos descartar cualquier situación externa o interna que haya podido vivir el investigador del CTI”, dijo Cantillo Villamizar.
El dirigente sindical pidió que se investigue el comportamiento hostil de la directora del CTI y del director de Fiscalías, el cual asegura, ha hecho que se aumente la congestión de procesos debido a la improvisación de cambios de fiscales, ya que en cada una de las investigaciones se ha tenido que otorgar la libertad a los capturados por vencimiento de términos.
“Que se hagan cambios”
El presidente nacional de Asonal Judicial dijo que “la difícil situación ha conllevado a que se haya solicitado por parte de un sector numeroso de trabajadores de la Fiscalía, se haga el cambio inmediato tanto del director de Fiscalías como la directora del CTI porque se ha demostrado de que las políticas laborales implementadas por ellos en ningún momento han servido”.
Por Redacción Judicial