En medio de fuertes medidas de seguridad fue llevado ante un juez de control de garantías en la mañana de ayer, Víctor Manuel Palencia Mejía, confeso asesino de su esposa. En la audiencia fue cobijado con medida de aseguramiento intramuros por el delito de homicidio.
La audiencia tuvo lugar en los juzgados de Magangué. El hombre aceptó los cargos que le imputó la Fiscalía, e insistió en que mató a machetazos a Rocío del Carmen Ramírez Vásquez porque tenía la certeza de que sostenía un romance con su exmarido.
Luego de allanarse a los cargos, la audiencia se dio por terminada. Pero durante una media hora las autoridades estuvieron analizando cómo sacar al imputado del lugar para que no corriera peligro, puesto que mucha gente lo esperaba a la salida para cobrarle el crimen.
A las 12:30 de la tarde de ayer, la Policía sacó a Palencia Mejía en una camioneta que lo llevó a la estación de Policía de La Esmeralda, adonde permanecerá recluido por el momento, debido a que la cárcel del municipio bolivarense está cerrada por hacinamiento.
Katerine Surmay Ramírez, unas de las hijas de la víctima, dijo que no salía de su asombro ante lo sucedido porque desde el pasado 14 de febrero, cuando la pareja se casó, nunca se le vio discutir.
Otra hija de la mujer, Zunilda Surmay Ramírez contó que alcanzó a ver el cadáver, y por ello está segura de que tuvo que sufrir mucho pues los efectos sobre su cuerpo eran brutales. Además buena parte de la casa se encontraba sucia de sangre; en la habitación, el abanico, la cortina, el colchó, y la sala, donde fue hallado el cuerpo.
Un vecino, que prefirió no identificarse, aseguró que lo que hacía la mujer era ayudar al padre de sus hijos, que tiene problemas de salud, pero que nunca se notó que hubiesen reanudado su relación sentimental. RR