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A punta de bombas lacrimógenas, fuerzas antimotines disolvieron este miércoles una gigantesca movilización contra el presidente de Venezuela Nicolás Maduro, en Caracas y otras ciudades del país, donde estallaron focos de violencia que dejaron dos jóvenes y un militar muertos.

Carlos José Moreno de 17 años murió en Caracas y Paola Andreina Ramírez de 23 en San Cristóbal (oeste), según la Fiscalía, con lo que suman siete fallecidos en tres semanas de protestas que exigen elecciones para sacar del poder a Maduro, a quien sus detractores acusan de hundir al país en una severa crisis económica y política.

Los jóvenes fallecieron por disparos de desconocidos en motocicletas. El hombre en una clínica a la cual llegó herido de bala en la cabeza y la mujer en una plaza cercana a una concentración de opositores, en circunstancias aún no esclarecidas, mientras que el efectivo de la guardia militariza de Venezuela murió de un disparo anoche en las afueras de Caracas.

Familiares del joven asesinado en Caracas declaró a periodistas que el fallecido era estudiante de economía y estaba de paso por la manifestación pues había salido de su casa, para cruzar Caracas de oeste a este, y participar en un partido de fútbol.

'Hay una versión de que en esa concentración, llegaron unos sujetos a bordo de una moto de la cual se bajó el parrillero (pasajero) y estaba escondido detrás de un container de basura, el cual lanzó varios disparos y las personas corrieron, pero él no tuvo esa velocidad', explicó.

En Caracas

Los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y manifestantes que les tiraron piedras y cócteles molotov estallaron con fuerza en una estratégica autopista y varios sectores del oeste de Caracas.

Además de en San Cristóbal, capital de Táchira, también se reportaron choques en ciudades de los estados Zulia, Carabobo, Mérida y Anzoátegui, con varios heridos.

En lo que llamaron ‘la madre de todas las marchas’, la sexta en abril, los opositores salieron de unos 26 puntos de concentración pero, como en movilizaciones anteriores, no lograron llegar al centro de Caracas, bastión chavista, donde sí manifestaron miles de seguidores de Maduro.

El líder opositor Henrique Capriles recibió una lluvia de gases cuando se acercó a un bloqueo militar en la autopista Francisco Fajardo. Varios manifestantes huyeron lanzándose a las aguas negras del río Guaire.

'No tengo ni comida en la nevera. Tengo un niño de dos años que mantener y estoy desempleado. Todo por culpa de Maduro', dijo a la AFP Jean Tovar, de 32 años, con piedras en las manos para enfrentarse a los militares que aún lanzaban lacrimógenas al final de la tarde de ayer en el este de Caracas.

Las manifestaciones dejaron un saldo de más de 400 detenidos, aseguró a Efe la ONG Foro Penal Venezolano, y al menos 57 personas lesionadas, según indicó el alcalde opositor del municipio caraqueño Chacao, Ramón Muchacho.

Además, la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) convocó ayer a nuevas manifestaciones para hoy en los mismos puntos y a la misma hora que las que se organizaron este miércoles para responder a la 'represión' del Gobierno de Nicolás Maduro.

'¡Acá seguimos mandando!'

Desde una tarima en la céntrica avenida Bolívar, Maduro cantó victoria ante una marea roja de seguidores: 'Hoy (ayer) pretendieron asaltar el poder y hemos derrotado otra vez a la derecha corrupta intervencionista. Acá seguimos mandando', gritó.

Maduro dijo estar 'desmantelando el golpe de Estado terrorista', al precisar que fueron capturados más de '30 encapuchados' este miércoles. Unas 200 personas permanecen detenidas de las marchas anteriores.

El gobernante, quien concluye su mandato en 2019, aseguró además querer ir 'pronto' a elecciones para 'ganar esta batalla ya', sin aclarar qué tipos de comicios.

Las elecciones de gobernadores debieron realizarse en 2016, pero fueron suspendidas y aún no tienen fecha. Las de alcaldes están pautadas para este año y las presidenciales, para diciembre de 2018.

Inquietud internacional

La manifestación de ayer generó preocupación en la comunidad internacional. Once países latinoamericanos pidieron al gobierno garantizar el derecho a protestar pacíficamente.

Cientos de personas se han manifestado contra el gobierno chavista en los últimos días en varias ciudades de Europa y América, como este miércoles en Madrid.

Estados Unidos, por su parte, lanzó una dura advertencia a los funcionarios públicos venezolanos de desistir de la 'represión'. Maduro calificó ese aviso como una 'luz verde a un golpe de Estado'.

'Hubo muchas bombas lacrimógenas'

La comunicadora social venezolana Yessyka Reyes le reportó a EL HERALDO en tiempo real, aproximadamente por espacio de 8 horas, lo acontecido durante la marcha que se desarrolló ayer en Caracas. Narró cómo fueron los momentos vividos cuando fueron atacados por miembros de la Guardia Nacional.

'Hubo momentos de confusión, donde creíamos que eran los militares quienes arremetían contra nosotros, pero nos dimos cuenta de que fueron muchos los policías que reprimieron la manifestación, llegamos a un punto en donde no nos dejaron avanzar, varios de los líderes intentaron dialogar con los uniformados para poder continuar pero fue imposible, fue allí cuando de un momento a otro comenzaron a lanzar muchas bombas lacrimógenas para dispersar la manifestación', relató la joven de 25 años.

'La mamá de las marchas’ marcó un antes y un después en la historia política y social de Venezuela. Mucho entusiasmo, mucha energía y adrenalina fue lo que vivimos, y a pesar de llegar a un punto en el que no sabíamos qué hacer, porque nos tenían acorralados, creo que esto no nos va a quitar las ganas de luchar por nuestro país', dijo.