Rusia culpó a Turquía por el derribo de su bombardero Su-24 por un caza turco en la frontera con Siria y anunció planes de desplegar misiles antiaéreos en el país árabe para proteger sus aviones de nuevos ataques.
'Tenemos suficiente cantidad de información que confirma que fue un acto premeditado, planeado de antemano. Esto se parece mucho a una provocación', aseguró Serguéi Lavrov, el ministro de Exteriores ruso, en rueda de prensa.
Lavrov dejó bien clara la postura oficial a su colega turco, Mevlüt Çavusoglu, al asegurarle por teléfono que Ankara 'se había puesto del lado del Estado Islámico (EI)' al derribar un avión que cumplía una misión de bombardeo contra ese grupo terrorista.
'Algunos de nuestros socios que se pusieron ayer en contacto con nosotros nos dijeron que se trató de una evidente emboscada. (Los turcos) Estaban esperando, al acecho, y buscaban un pretexto', subrayó.
Al mismo tiempo, manifestó: 'No tenemos intención de combatir con Turquía, ya que la relación con el pueblo turco no ha cambiado. Los problemas los tenemos con las acciones de las actuales autoridades turcas', que según Moscú buscan la islamización del país.
Lavrov saludó la iniciativa de cerrar la frontera entre Siria y Turquía para evitar el flujo de terroristas y su financiación –Rusia acusa a Ankara de ser 'cómplice' del EI– propuesta ayer por el presidente francés, Francois Hollande, en su reunión con el mandatario estadounidense, Barack Obama.
'Creo que es una propuesta acertada. Confío en que mañana Hollande nos dará más detalles al respecto. Nosotros estaríamos dispuestos a estudiar seriamente las medidas necesarias para ello', dijo.
El despliegue
Rusia desplegará en su base aérea en la provincia de Latakia, a apenas 30 kilómetros de la frontera turca, un sistema de misiles antiaéreos S-400, capaces de derribar objetivos aéreos a una distancia de 250 kilómetros.
'Advertimos de que todos los objetivos que representen para nosotros una amenaza serán destruidos', comunicó el Estado Mayor del Ejército ruso.
El jefe de la diplomacia rusa descalificó todos los argumentos turcos, como que desconocían que el avión era ruso y que esa zona también es sobrevolada por la aviación siria, y recordó que los cazas de la Otan también realizan misiones en esa frontera .
Por su parte, el piloto que sobrevivió al siniestro del bombardero ruso Su-24 derribado ayer en Siria por un caza turco aseguró ayer que el avión ruso no violó en ningún momento el espacio aéreo de Turquía.
'No, eso está descartado, ni siquiera durante un segundo, más aún cuando nosotros volábamos a una altura de cerca de 6.000 metros y el cielo estaba despejado', dijo Konstantín Murajtin a la televisión pública rusa.