Desde muy pequeño Jonatan Oliveros tenía la curiosidad por descubrir el interior de los objetos electrónicos.
El control del televisor, un teléfono celular, una consola de videojuegos, nada se escapaba de su interés por encontrarle una explicación al funcionamiento de las cosas, por desmitificarlas y comprenderlas.
Un día intentó formatear un computador; por sus conocimientos elementales —casi nulos—en aquel momento, el aparato no volvió a prender. Desde ese momento decidió especializarse en las aulas para adquirir una instrucción que le permitiera 'aprender' y también 'ayudar a los otros'.
Daniel Salgado y Alejandro Salas cursan junto a él el grado 11 B en el Colegio Don Bosco. Estos jóvenes, estudiantes del taller Reparación y Mantenimiento de Computadores de la institución, son abanderados de un proyecto que busca obsequiar un computador a personas de escasos recursos del barrio Rebolo.
A través del proyecto Computadores Salesianos para Educar, los estudiantes de la escuela reciben donaciones de teclados, monitores, CPU, mouse o cualquier otra parte que no funcione o no se utilice en los hogares. Luego de una revisión de los estudiantes y la valoración de las piezas, las reparan hasta que puedan volver a tener una vida útil en manos de una familia que las necesite.