Con fondos locales, el Distrito sostiene su apuesta por la vivienda digna, aun cuando el Gobierno recorta apoyos y suspende postulaciones a programas estatales.
Falta ver si las disculpas –que a regañadientes aceptó Trump– son suficientes para que el magnate recupere la confianza del mandatario.
La coyuntura nacional no tiene colores, ni banderas y –mucho menos– orillas políticas. No es de derecha, ni de izquierda. Nos incluye a todos.
La crisis institucional agudizada tras el ataque contra Miguel Uribe exige responsabilidad de la clase política por encima de intereses partidistas y personales.