
Las revelaciones hechas en el tema del ‘carrusel de la salud’ evidencian el papel de los bancos al financiar a las EPS, mientras éstas reciben los pagos del Fosyga y de otros entidades.
El total de la deuda con las entidades financieras aún no ha sido revelado por los entes de control que están investigando la situación y han mandado a la cárcel a cinco personas implicadas en el desfalco.
Sin embargo, el gremio de los médicos en Colombia tiene sus estimaciones.
Germán Fernández, vicepresidente de Asuntos Gubernamentales de la Federación Médica de Colombia, asegura que las deudas de las EPS con los bancos alcazan $2 billones.
“Es una proyección que hacemos pensando en que una sola EPS, como SaludCoop, le debe a la banca $200.000 millones, y teniendo en cuenta que hay 70 empresas prestadoras de salud en el mercado”, dice Fernández.
En el caso de SaludCoop, se trata de créditos vigentes de tesorería, con cupo rotativo, que servían para pagar las deudas de la entidad y cuyos plazos van desde los 30 hasta los 90 días, según explica Édgar Pabón, delegado de la Superintendencia de Salud como Interventor Administrativo de la EPS, que se calcula tiene deudas totales por más de $400.000 millones.
“Los banqueros -senala Fernández- deben estar nerviosos con estas acreencias porque lo que se ha evidenciado también es que no hay una entidad que conozca a ciencia cierta cómo están las finanzas de las EPS o su solvencia para pagar todas esas deudas”.
Según el directivo, el gremio que representa, viene prendiendo las alertas sobre este asunto desde hace mucho tiempo y le ha solicitado a la Superintendencia de Salud y al Ministerio de la Protección auditorías a las finanzas de las EPS, sin conseguir nada.
“Lo último que hicimos fue enviar derechos de petición a estas entidades para que nos cuenten cómo es que estas EPS están usando este dinero y a cuánto ascienden sus deudas con el sistema, pero hasta la fecha no nos han contestado”, dijo el representante gremial.
La mitad de las deudas de SaluCoop son con bancos, la mayor es con Banco de Bogotá, y según Pabón no son créditos vencidos.
BOGOTÁ