El exgobernador de Córdoba, Benito Osorio prendió el ventilador ante la JEP
Durante las primeras audiencias vinculó a mandos militares de la región con las AUC.
Se comenzaron a conocer detalles sobre la declaración de Benito Antonio Osorio Villadiego, el exgerente del Fondo Ganadero de Córdoba y exgobernador de este mismo departamento, quien fue procesado por nexos con los paramilitares y actualmente comparece ante la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP.
Según se supo, en las primeras revelaciones señalan la supuesta relación del general (r) Rito Alejo del Río, y el empresario Luis Gallo, quienes habrían tenido vínculos con las AUC.
Precisamente el aporte a la verdad de Osorio Villadiego consiste en demostrar ante la JEP la alianza de funcionarios del Estado, políticos, empresarios e incluso militares, con grupos de autodefensas en la zona de Tulapas, correspondiente a los municipios de Necoclí, Turbo y San Pedro de Urabá.
Osorio habría mencionado al general (r) Rito Alejo del Río como la persona a quien se veía con frecuencia en la zona de influencia paramilitar.
“Fui invitado a alguna reunión, pero no pude asistir. Pero me enteré que el general Iván Ramírez, dijo que estaba hablando en nombre de las Fuerzas Militares y que debían prestarse apoyo mutuo para controlar el avance de la guerrilla en la Costa Norte y por este hecho crearon el Bloque Norte de las AUC”, narró.
Con relación a los mandos involucrados sostuvo que “Rito Alejo del Río y Martín Carreño Sandoval quien fue comandante de la Décimo Primera Brigada con sede en Montería y posteriormente reemplazó a Rito Alejo del Río en la Brigada XVII con sede en Carepa, donde fue él invitado al igual que Sor Teresa”.
En toda esta labor las autoridades tratan de establecer cómo los grupos de autodefensas en la zona de Tulapas, los municipios de Necoclí, Turbo y San Pedro de Urabá, se apropiaron de cerca de 4.000 hectáreas y donde habrían acordado con directivos del Fondo Ganadero de Córdoba, no pagarle más de $350 mil pesos por hectárea a los campesinos a quienes despojaron de sus tierras y los obligaron a salir de la zona, en la que cabe señalar, es mencionada la finca ‘No hay como Dios’ que terminó en manos del destituido y condenado magistrado Jorge Pretelt.
