Ad portas de cumplirse dos años de la muerte del guardián del Inpec, Hugo González, en el barrio La Pradera, de la ciudad de Montería, su caso se revive.
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Al parecer su deceso no habría sido accidental -producto de una caída en la terraza- sino que fue agredido con un objeto contundente en la cabeza, al parecer un martillo, y ello le produjo la muerte que no le permitió, si quiera, llegar con signos vitales al centro médico asistencial más cercano al que fue llevado.
Lo aberrante del caso es que este involucra a familiares de la víctima que ya fueron capturados. Entre esos a su esposa Angélica Petro, a su hijo Jorge Camilo González Petro y a la esposa de este.
Sus detenciones las hicieron efectivas el miércoles 4 de junio integrantes de la Sijin de la Policía Metropolitana de Montería para que respondan por los hechos que ocurrieron el 24 de julio del año 2023 en el barrio La Pradera.
Ese día Hugo González había llegado a su casa después de estar en una esquina cercana tomando con unos vecinos y a los pocos minutos algunos vecinos se percataron de que su cuerpo lleno de sangre fue sacado hasta la terraza. Esta versión es la que tiene retenidos a los familiares del guardián que creyeron que el caso estaba cerrado porque habían dicho que este se cayó cuando corría para evitar ser víctima de un atraco, pero no habría sido así.
