Según el calendario gregoriano, nuestro sistema de distribución del tiempo, el mundo hoy vive un ciclo especial: un pequeño lapso de minutos en los que el futuro se vuelve presente y el presente se transforma en pasado. Y así, mientras todo el país entona ‘faltan cinco pa’ las doce’, termina un año, comienza el otro y dejamos en la Noche Vieja las malas energías para recibir el año nuevo con las expectativas de cumplir retos y propósitos.
Todos los colombianos, de una forma u otra, tenemos un deseo en común: la paz para nuestro país. Sin embargo, este 2020 deja una paz fracturada y que, según el pronóstico de los expertos en el 2021 empezaría a navegar en la incertidumbre. Son muchos los retos que enfrenta Colombia en torno a la paz: garantizar la seguridad a excombatientes, líderes y lideresas; mantener la estabilidad de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), avanzar en el esclarecimiento de la verdad, y superar los discursos de odio son algunos de los desafíos que se enfrentarán en el Año Nuevo.
