“Hasta el tiempo necesita de ayuda para sanarnos”
Víctimas de la violencia durante el conflicto armado en Colombia hallaron en los espacios de la Comisión de la Verdad la oportunidad para reconciliarse con la vida.
Para *Sofía “es muy difícil olvidar” el episodio de violencia que le tocó enfrentar una tarde de marzo de 2002 cuando se encontraba en una finca de los Montes de María, Bolívar.
Esa tarde la mujer recuerda que llegaron hombres en motos vestidos de camuflado y la rodearon y comenzaron a preguntarle dónde tenían escondido a los guerrilleros, a lo que Sofía les respondió que no sabía de qué le estaban hablando.
“Esos hombres me golpearon y me obligaron a que gritara, supongo para que alguien saliera, estuvieron por más de 15 minutos en ese son. Después sacaron una navaja y me cortaron el cabello, me rompieron la ropa, me hicieron varias heridas en las piernas y me abusaron sexualmente”, cuenta la mujer, al tiempo que deja claro que manifiesta su relato con la intención de que “las personas sepan, conozcan y no olviden las cicatrices que la guerra ha dejado en Colombia”.
Sofía dice que durante muchos años su historia le daba vergüenza y la hacía sentir hasta cierto punto culpable, situación que la llevó a padecer episodios depresivos.
“Yo sabía que muchas mujeres habían pasado por un episodio similar al mío, pero vivía con el estigma de ser la mujer que fue abusada por los paramilitares. Fueron muchos años de silencio, de guardar en lo más profundo de mi alma eso que de vez en cuando intentaba salir, pero apretaba duro los dientes para que no se escapara”, manifestó Sofia.
Tras la firma del Acuerdo de Paz y la conformación de los órganos de la justicia transicional, especialmente de la Comisión de la Verdad, abrieron una serie de espacios de escucha que le permitieron a Sofía poder “soltar” lo que por dentro la estaba martirizando.
“Dicen que el tiempo sana, pero hasta el tiempo necesita de ayuda para sanarnos. A mi me sirvieron mucho esas experiencias de contar, de librarme de eso que tenía por dentro y de poder ver que mi historia tenía mucho en común con la de otras mujeres”, destacó.
Un liderazgo. Para Marta Ruiz, comisionada de la Comisión de la Verdad, que el pasado sábado participó en el Gran Diálogo Caribe que se celebró en Barranquilla, indicó que las mujeres hoy en día resultan ser el factor “más interesante” en materia de liderazgo que tiene el país.
“Las mujeres más que víctimas se han convertido en personas que están construyendo paz y exigiendo derechos desde su victimización, pero resignificando mucho lo que han vivido”, señaló la comisionada.
La funcionaria puso de ejemplo una frase que en alguno de los encuentros una mujer le comentó: “Los hombres hacen la guerra y las mujeres cargan con ella”.
“Lo anterior no sólo se reduce a las víctimas de violencia sexual, sino el desplazamiento que se lo cargaron las mujeres en los hombros, la desaparición forzada y la búsqueda de sus parientes. Todos esos aspectos los han llevado las mujeres, es decir, son ellas las que están cambiando la conciencia de este país”, dijo Ruiz.
La comisionada considera que los espacios fomentados por el órgano de justicia que representa, son escenarios donde la “conciencia crítica” de la mujer está saliendo a relucir. “Estos espacios están construyendo pensamientos y liderazgo y eso es lo que va a ser que este país también salga adelante en la paz. Las mujeres siempre serán centrales en este proceso”, resaltó.
Precisamente en noviembre de 2020, unas 200 mujeres víctimas del conflicto armado y lideresas de organizaciones sociales del Magdalena, Cesar, La Guajira, Atlántico, Bolívar, Sucre y Córdoba firmaron el gran pacto para la no repetición de las violencias sexuales y políticas contra las mujeres, una acción impulsada por el Ágora de Mujeres de la Comisión de la Verdad.
En la proclama las mujeres pidieron el “inaplazable posicionamiento de la verdad e implementación de medidas que nos aseguren de manera efectiva la realización de nuestro derecho a la justicia, a la reparación y las garantías de no repetición”.
Yusmidia Solano, lideresa de la Red de Mujeres del Caribe, dijo que es urgente trabajar juntos para la reconstrucción del tejido social y lazos entre la organización en la región y el país. “Tenemos que tomar en serio esos diálogos, los recuentos, las memorias, las acciones de esparcimiento de la verdad porque solo a partir de conocerlas se puede dar el perdón y el compromiso de no repetición”.
Las Ágoras son espacios de escucha y reflexión activados por la Comisión de la Verdad para la acción transformadora de las mujeres víctimas de violencias sexuales, de violencias políticas en el marco del conflicto armado, orientadas a profundizar en la interpretación, la comprensión y en la apropiación de lo ocurrido, del por qué y del para qué ocurrió.