
Buscar la verdad en el Caribe: así avanza la reconstrucción del conflicto
La Comisión de la Verdad, desde el 2019, a través de sus distintos espacios de escucha ha recopilado “dolorosas realidades” que presentará en su informe final el próximo 25 de noviembre.
“Dime la verda’, solo la verda’; no hay reparación, ni justicia si no es con la verdad. Contame quiénes lo hicieron, decime cómo lo hicieron, pa’ que pueda perdonar”, retumba tras el lamento de una gaita, en una cumbia triste, el implorar de una víctima. “Dime la verdá”, la canción que hoy suena como himno de la Comisión de la Verdad enmarca una de esas historias, de las que no pueden volver a pasar.
Buscar la verdad en un país donde la realidad la superó la ficción de la guerra fue la compleja tarea que asumió la Comisión de la Verdad en 2019. Y hoy, a 125 días de terminar su mandato ha escuchado a 25.198 personas en 13.552 entrevistas individuales y colectivas, recibiendo un total de 867 informes a nivel nacional.

“Tenemos el mandato de esclarecer la verdad, de decir el porqué y el cómo de la guerra, también entender por qué persiste el conflicto. La Comisión de la Verdad, paralelo al esclarecimiento, en el 2020 y en lo que va del 2021 ha desarrollado un diálogo social en el Caribe con distintos sectores. Este año se han desarrollado 17 iniciativas de conversaciones y reconocimientos que han llegado o impactado a más de 8.000 personas”, dijo Ana María Ferrer, coordinadora de la Comisión de la Verdad en Caribe.
En cuanto al Caribe la Comisión de la Verdad le reportó a esta casa editorial que ha recibido 10 informes en los departamentos asociados con la Macroterritorial Caribe e Insular y se han asociado hechos o temas de departamentos pertenecientes a la región en 111 informes.

La búsqueda de la verdad en la Región se ha desarrollado desafiando y aprendiendo de los nuevos tiempos marcados por la crisis sanitaria que afecta al mundo. En el Atlántico, Bolívar y San Andrés se construyeron dos proyectos de diálogo social como son la ‘Ruta del Cimarronaje’ y ‘Ágora de Mujeres’, que se convirtieron en espacios de escucha y visibilización de los impactos del conflicto armado y las estrategias de resistencia.
El número de espacios de escucha de la Comisión de la Verdad tanto públicos, como privados entre 2020 y lo que va de 2021 asciende a 40, a pesar de las dificultades de la virtualidad. Entre estos, destacan los espacios de reconocimiento de exguerrilleros, exparamilitares y agentes de estado.
En departamentos como Córdoba, Magdalena, Cesar y La Guajira la Comisión de la Verdad han propiciado escenarios virtuales y semi presenciales de escucha a las víctimas de despojos, muertes y estigmatizaciones, quienes también han contado su verdad, sus historias, los impactos del conflicto.
En Sucre se han creado escenarios para el reconocimiento de responsabilidades en casos tan sonados como los ocurridos en Chalan, Colosó y Toluviejo,

“Hemos escuchado una variedad de voces que serán la base del informe final, que deberá ser apropiado por la sociedad, un informe que sirva para movilizar a la sociedad civil, a los gremios, a las universidades, a todos los sectores, un informe que sirva de cimiento para transitar hacia la convivencia pacífica y que contribuya a superar lo que vivimos y la no persistencia del conflicto”, dijo Ferrer.
Encontrar la verdad a través de un proceso de esclarecimiento, diálogo social y reconocimientos ha convocado desde las víctimas hasta los victimarios, pues reconstruir una verdad, necesita la historia desde cada uno de sus actores, pues con los testimonios de las víctimas, de los responsables y distintos actores del conflicto, y con base en una metodología de investigación diseñada especialmente para ello, se construirá el informe final que será entregado al país este 25 de noviembre y que contará qué fue lo que pasó en más de 50 años de guerra. Las causas del horror que vivieron centenares, miles de colombianos y las razones por la que todavía persiste el conflicto.
“No me interesa la reparación, solo quiero que se limpie el nombre de mi hijo, que se deje en claro que no era guerrillero”, es el clamor de una madre de víctimas de ejecuciones extrajudiciales o ‘falsos positivos’, pues para las víctimas “la verdad es la única forma de sanar”.
La Corte Constitucional de Colombia está estudiando una demanda para alargar más allá del 28 de noviembre el periodo de la Comisión de la Verdad, creada por el acuerdo de paz firmado entre el Gobierno y las Farc, que fue presentada por víctimas que alegan que el trabajo de este organismo ha tenido retrasos por la pandemia de la covid-19.
“Si queremos cumplir el mandato de que las víctimas somos el centro, la Corte Constitucional debería contemplar esta demanda”, afirmó el representante de la Corporación Personas con Capacidades Diversas (Percadi), Édgar Bermúdez.
La demanda fue presentada por la Percadi, la Asociación de Víctimas Unidas de Granada (Asovida) y la Red Colombiana de Lugares de Memoria, con el apoyo del Programa Paiis de la Universidad de los Andes y Dejusticia, que argumentan que la imposibilidad de viajar a las regiones por la pandemia perjudicó el trabajo de la Comisión.
En esa línea aseguran que los tres años de trabajo del organismo “deben ser efectivos para lograr cumplir con lo pactado en el Acuerdo Final de Paz, algo que la pandemia ha impedido”.
“Explicamos que la Comisión solo ha funcionado un año, tres meses y 14 días en condiciones de normalidad, lo que corresponde a un 40 % de su periodo. El resto del tiempo, si bien no han suspendido las actividades, sí han tenido que trasladarse a la virtualidad y reducir el contacto directo con las comunidades”, agregaron en el comunicado.
Es por ello que consideran que, si no se prorroga el mandato de la Comisión, “se estaría incumpliendo el derecho de las víctimas a la verdad y la no repetición”.