
Capturan a tres mujeres y un hombre que cobraban extorsiones en Cesar
Según la Fiscalía estas personas reclamaban los dineros que a través de empresas de giros y entidades bancarias depositaban las víctimas.
En un operativo conjunto, el CTI de la Fiscalía y la Policía capturaron en Valledupar y en la zona rural del Cesar a tres mujeres y un hombre que presuntamente venían cobrando dineros de extorsiones que se realizaban desde diferentes cárceles del país.
De acuerdo con la investigación, estas personas eran las encargadas de recibir los dineros que depositaban las víctimas, a través de empresas de giros y entidades bancarias.
Los detenidos fueron identificados como Any Paola Serpa Orozco, Mileydis Andrea Ballesteros Rojas, María Eustaquia Vásquez Torres y Edis Alberto Mercado González, quienes, de acuerdo con la Fiscalía, recibían los dineros que las víctimas depositaban bajo la amenaza de atentar contra ellas o sus familias en caso de negarse a las exigencias de los extorsionistas.
Labores de Policía Judicial permitieron evidenciar que los implicados obtenían información mediante el uso de directorios telefónicos, llamadas simuladas de empresas financieras, clasificados de prensa, recopilación de información de la población reclusa, entre otras estrategias.
De igual forma, la Fiscalía logró identificar que las llamadas extorsivas eran realizadas desde la cárcel Picaleña, de Ibagué (Tolima), la cárcel de Cómbita (Boyacá), el Establecimiento Penitenciario y Carcelario la Esperanza, de Guaduas (Cundinamarca) y el Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar (Cesar).
En operativos adelantados por las autoridades se han descubierto e incautados celulares, que ingresan a los centros carcelarios, muchos de ellos usados para cometer las extorsiones.
Según la Policía, existen diferentes modalidades de extorsión carcelaria, entre estas las de supuestos integrantes de grupos armados ilegales, en la cual los delincuentes realizan llamadas desde el interior de los centros penitenciarios y simulando ser integrantes de grupos armados al margen de la ley o estructuras de crimen organizado; con información de las víctimas que han obtenido a través de directorios telefónicos, medios de publicidad, redes sociales entre otros, identifican a las víctimas solicitándoles sumas de dinero; y la de la negociación extorsiva en la que les exigen a las víctimas realizar pagos mediante empresas de giros.