Cartagena. En el barrio Blas de Lezo, uno de los más tradicionales de Cartagena, la polémica suscitada por la placa develada por el príncipe Carlos de Inglaterra no ha pasado inadvertida.
Las razones saltan a la vista. Se trata del barrio que lleva el mismo nombre del teniente general de la Armada Española, cuya estatua permaneció solitaria durante décadas, como símbolo de la victoria ibérica ante el intento de invasión de los ingleses a Cartagena de Indias, y que ahora comparte su espacio con una placa que honra a los derrotados invasores, frente al colosal Castillo San Felipe de Barajas.
El almirante Vernon, el inglés que en compañía de sus 26.000 hombres sucumbió en su intento de adueñarse de Cartagena, para muchos de los contradictores de la placa, ahora parece estar por encima de los criollos y negros que dejaron su sangre para defender la ciudad.
Yolanda García, una de las fundadoras del barrio Blas de Lezo en 1961, es una de las principales contradictoras de la placa.
'Frente al Castillo San Felipe solo tiene que estar la estatua de Blacho (como se refiere a Blas de Lezo). Aunque se trate de un español, con todos los defectos que pudo tener Blas de Lezo, él, por lo menos, defendió la ciudad', anotó.
Sostuvo que en Cartagena 'no podemos arrodillarnos ante todos esos ingleses que fueron derrotados por los nuestros, solo porque había que agachar la cabeza ante el príncipe Carlos'.
Yolanda, pensionada y madre de cinco hijos, consideró que lo más acertado es que la placa sea retirada. 'No sé qué están esperando para quitarla, se la pueden llevar para cualquier parte, pero en Cartagena no debe estar', dijo.
Raúl Galvis Pájaro, otro de los fundadores del barrio, comparte la opinión de su vecina Yolanda García.
Galvis, quien recordó brevemente las razones por las que su barrio fue bautizado como Blas de Lezo, calificó la decisión del alcalde como una 'equivocación'.
'Se llama así porque, cuando fue fundado, tenían presupuestado traerse la estatua de Blas de Lezo para el parque principal. Sin embargo, no porque le tuviéramos rabia a este personaje, tomamos la decisión de no recibirla. En ese momento consideramos conveniente que el monumento estuviera frente al Castillo San Felipe, símbolo de la victoria de los criollos', dijo.
En lugar del almirante español fue puesto un altar a la Virgen del Carmen, que es la patrona', dijo Galvis.
Raúl Galvis Pájaro, de 77 años, es uno de los habitantes de Blas de Lezo más orgullosos del vecindario en el que reside.
Recordó que las primeras etapas de construcción del barrio, debido a que se trataba de personas de muy escasos recursos, a Blas de Lezo llegó ayuda extranjera.
'En la década de los 60, cuando el barrio apenas estaba comenzando, el presidente John F. Kennedy, de los Estados Unidos, nos ayudó con un programa que se llamaba Alianza para el Progreso. Como teníamos los predios para hacer nuestras casas, los gringos nos incentivaban para que saliéramos adelante y pavimentáramos las calles. A la gente que veían que se esforzaba, le llegaban alimentos y ayudas desde Estados Unidos. Como agradecimiento, bautizamos la calle más importante del barrio Como la Avenida Kennedy', puntualizó.
Entre las anécdotas diarias que giran en torno al tradicional barrio Blas de Lezo, y de la polémica que ha suscitado la placa en honor a los ingleses, también están presentes los que prefieren restarle importancia al asunto.
Tal es el caso de Alejandro Nel Pacheco Argumedo, de 89 años, un pensionado de la Policía que fundó el conocido Club de amigos de Blas de Lezo, quien considera la develación de la placa como una anécdota para la historia.
'Considero que la placa abordó una parte de la historia, que ha generado cierta controversia. Pero, a mi juicio, se ha tratado el tema con mucho alboroto', dijo Pacheco.
A rescatar la memoria histórica de la ciudad’. La historiadora Modesta Barrios, especialista en docencia universitaria, maestra en educación y candidata a Doctorado en ciencias de la educación; considera que, más allá de debatir sobre el papel que desempeñó Blas de Lezo frente a los ingleses, es necesario promover el rescate de la memoria histórica de Cartagena.
'Blas de Lezo hizo su labor, como centinela del Castillo San Felipe, que consistía en defender su honor y el de su país. Sin embargo, no es menos importante el papel que desempeñó cada uno de los negros esclavos que participaron en la construcción del Castillo San Felipe. Más allá de eso, tenemos que preguntarnos dónde quedó nuestra memoria histórica', dijo.