Fallas en el sistema de energía eléctrica dejaron sin luz a varios sectores del sur, norte y centro de Barranquilla durante más de 15 horas, luego de una leve lluvia que se presentó en la madrugada del martes. La emergencia ocasionó caos vehicular, suspensión de rutas de transporte masivo, bloqueo de vías, pérdidas comerciales, dificultades en la atención en salud y en instituciones educativas.
En medio del silencio que desde las dos de la mañana dejó el apagón en el barrio Boston, uno de los más de 50 afectados, un grito interrumpió el sueño de Sarina Fernández: su padre de 93 años necesitaba ir al baño, una incontinencia urinaria lo hace levantarse de la cama cada media hora. Un foco con una luz tenue, que permanece encendida toda la noche en su cuarto, guía sus pasos, pero esta vez no pudo hacerlo solo. Lea además: Falta de energía deja fuera de servicio semáforos en Barranquilla.
'Mi papá es un adulto mayor que sufre de alzheimer, aunque puede hacer varias actividades sin asistencia, yo dejo la luz encendida por su seguridad. Anoche me tocó desvelarme y dormir en el piso de su cuarto para estar pendiente de él y de mi mamá de 83 años. Amaneció y la situación no se compuso', afirmó Fernández.
Sin haber 'pegado el ojo', la mañana la recibió con quejas colectivas de los tres clientes que ocupan los apartaestudios del segundo piso de su casa, ubicada en la calle 67 ente carreras 47 y 49. 'Creían que no había pagado el servicio de luz', contó la agente de bienes raíces, quien ayer tuvo un día libre a la fuerza.
Las ventas que usualmente realiza a través de internet y llamadas telefónicas desde su casa, fueron imposibles durante todo el día. Tuvo que apagar la señal de su celular para ahorrar su batería en caso de alguna urgencia, pues su padre presentaba mareos y podría necesitar una ambulancia.
'¿Electricaribe me va a reponer el dinero que me dejó de ingresar por el corte de luz, o iba a responder por la vida de mi papá si algo le sucedía? Es inconcebible que una ciudad de un millón de habitantes dependa de una empresa', expresó Sarina Fernández.
Ella es solo una de las ciudadanas que se contactó con EL HERALDO para manifestar sus molestias frente al servicio de energía, al ser imposible comunicarse con Electricaribe debido a que las líneas de atención al usuario permanecieron congestionadas, según reportó. Este diario recibió más de 20 llamadas en el transcurso del día de ayer e muchas quejas a través de sus redes sociales por el mismo hecho.

Avería de redes
Fallas en cuatro circuitos de la ciudad: San Roque, Universal, Atlántico y Pumarejo, y más de 200 daños de baja tensión, en transformadores y ramales fueron los responsables de provocar el apagón en varias partes de más de 50 barrios del Distrito.
Entre los afectados están Paraíso, Los Ángeles, La Concepción, Villa Country, Los Alpes, Las Colinas, Centro y Villa Campestre, Andalucía, Alto Prado, El Limoncito, Villa Carolina, Paraíso, Centro, Delicias, Salgar, La Luz, Santuario, Riomar, Carrizal, Las Palmas, Bellavista, Chiquinquirá, Recreo, Alborada, Porvenir y Modelo, entre otros. Consulte el Mapa del #ReporteApagón en Barranquilla.
Según informó Electricaribe, las fallas se presentaron debido a la alta contaminación de las redes por polución, salinidad y periodo de sequía, y el impacto que producen las lluvias al tener contacto con los mismos.
'La pequeña llovizna hace que la mezcla del agua con la polución que hay en las redes genere una especie de pasta que aísla el contacto del servicio, por eso se van a tierra las líneas y se presentan las averías', explicó Betty Yadira García, gerente de Electricaribe.
La empresa afirma que todos los días se llevan a cabo lavados de las redes eléctricas pero no en las mismas zonas. Por eso, de los 109 circuitos que tiene Barranquilla, se presentaron problemas en cuatro de ellos, los cuales suministran energía 'a casi todos los sectores de la ciudad', indicó García.
Otras afectaciones
Los usuarios de los municipios de Puerto Colombia, Sabanalarga, Santo Tomás y Palmar de Varela también reportan daños en el servicio de energía. Algunas instituciones educativas debieron culminar la jornada estudiantil antes de la salida estipulada. Asimismo, se registraron pérdidas económicas en establecimientos comerciales.
'Yo tengo varios restaurantes en Ciudad Jardín, en Paraíso y en el Centro que están sin energía. Ha sido una odisea mantener los alimentos refrigerados. Y las ventas bajaron porque la gente no quiere sofocarse del calor', expresó Javier Navarro.
Por otro lado, la explosión de un transformador en el barrio Paraíso dejó sin energía al Hospital Niño Jesús desde las once de la noche. Con una planta eléctrica pudieron garantizar los servicios de salud y la atención de los pacientes, pero las áreas comunes se encontraban sin ventilación.
'Los servicios prioritarios están cubiertos por la planta. Y el gasto extra se presentó en combustible, y de todas maneras la disposición de energía no es óptima. Reportamos a Electricaribe y quedaron en enviar una cuadrilla', indicó Alexandra López, gerente encargada del hospital.
La movilidad fue una de las grandes afectadas el día de ayer. El apagón de varios semáforos propiciaron la formación de embotellamientos, dos de estos a la altura de las carreras 46 y 47, hacia el norte de la ciudad.
La Secretaría de Movilidad Distrital registró daños en los semáforos de la calle 30 con 28, la calle Murillo, la calle 85 con 59B, la calle 79 con 49C, la calle 68 con 45, la calle 59 con 45, la calle 59 con 46, la calle 45 con 44, la calle 72 con 50, la calle 60 con 46 y la calle 65 con 46.
Además, se presentaron bloqueos de algunas vías por ciudadanos inconformes en Juan Mina y la calle Murillo con 15, a la altura de la bomba La Estrella. En la calle 30 hubo protestas que ocasionaron trancones en todo el municipio de Soledad. Y habitantes de la urbanización El Tesoro de Malambo cerraron por tres horas la Vía Oriental, alegando que llevaban dos días sin luz; fue necesaria la presencia del Esmad.
Durante la mañana Transmetro decidió suspender las rutas A3-4, A5-3, A3-41 y A3-40 que operan en los barrios La Central y Villa Sol de Soledad, como medida preventiva ya que en otras ocasiones se han presentado ataques a los buses.

Medidas de contingencia
A raíz de esta situación, Electricaribe duplicó el número de brigadas de atención de daños, llegando a 80 las brigadas de reparación de las redes eléctricas.
Paralelamente se reforzó la operativa del Centro de Operación Regional (COR) con el fin de contar con un mayor número de técnicos e ingenieros para coordinar la labor de las brigadas que se encuentran en los diferentes sectores de Barranquilla.
De acuerdo con la gerente, Betty Yadira García, 'la compañía trabaja con todos sus recursos para dar pronta solución a los inconvenientes de hoy. Hemos doblado la operativa, logrando restaurar el servicio en diversas zonas de la ciudad'.
El reto de Electricaribe es subir la inversión
En un informe sobre las inversiones de Electricaribe, que publicó EL HERALDO el mes pasado, la empresa aseguró que este año espera ejecutar unos $247.000 millones para temas como reducción de pérdidas, mejorar el servicio, abrir nuevos puntos, ampliar el número de cuadrillas en la calle y optimizar la infraestructura.
El anunció se dio luego de que el diario revelara que en el 2015 la compañía realizó la inversión más baja en los últimos nueve años: destinó $131.803 millones el año pasado, una cifra inferior a la de 2007 y superior a la de 2006, cuando invirtió $118.420 millones. El dato es muy inferior si se estima que en años como 2011 los esfuerzos de la empresa fueron superiores y se concretaron inversiones de $203.847 millones.
A eso se suma otro cuestionamiento. En 2015, la empresa recibió del Estado $71.977 millones (la cofinanciación más alta que el Gobierno le ha dado en los últimos años), pero invirtió menos. Evidencia de ello es que en 2014, Electricaribe recibió $35.113 millones, e invirtió $178.645 millones, y en 2013, el Gobierno solo le dio $2.601 millones, y la empresa asumió $191.304 millones.