El desafío de convertir al Centro en una zona turística

Además, implementar una movilidad inteligente se visiona como una forma de garantizar la accesibilidad de las personas a través de estrategias como la peatonalización de las vías, la implementación de una nueva red de ciclorrutas y de ciclo de parqueaderos.

El eje de rehabilitación económica, por su parte, pretende que se localicen nuevas actividades y se lleve a cabo la restauración y rehabilitación de edificaciones con enfoque comercial.

Mientras que en el ámbito de desarrollo social se busca transformar la percepción ciudadana actual con relación a las zonas céntricas.

Y a través del pilar de cultura, patrimonio y turismo se habilitará una estrategia integral de recuperación y conservación de los bienes de valor patrimonial. Por último, el eje temático de gobernanza se presenta para actualizar el componente normativo que determina la gestión urbana, social y económica.

El secretario de Control Urbano y Espacio Público, Ángelo Cianci, sostuvo que el plan para la reactivación socioeconómica del Centro Histórico de Barranquilla nació con la alianza de cooperación triangular de la Unión Europea junto con la ciudad de Málaga (España) y Santo Domingo (República Dominicana).

Este trabajo conjunto permitió plantear directrices tanto en aspectos físico-espaciales, sociales, culturales, económicos y ambientales, así como los diferentes mecanismos de gestión y financiamiento.

“Tuvimos la posibilidad de visitar ambas ciudades y conocer su desarrollo. Se contrató a la consultora Idom, la cual vino y habló con todos los actores y representantes del Centro para dejar un documento plasmado de lo que tiene que pasar en este importante sector en los próximos 30 años, es decir, todo lo que tendrá que recuperarse para mejorar la economía y que sea turístico”, añadió el secretario.

Cianci mencionó que la administración del alcalde Jaime Pumarejo se ha enfocado en mejorar espacios como las galerías Robertico y San Nicolás, así como la Esquina del Arte. En estos sitios, los vendedores cuentan con condiciones “dignas” para cumplir sus actividades económicas.

Además, mencionó que la recuperación del espacio público del Banco del Comercio, el Paseo Bolívar, el callejón de Robertico y el callejón de las cocineras son otros de los aportes que dejará la administración a este proyecto.

“Durante lo que queda de esta administración estaremos entregando grandes obras, tales como los mercados Gran Bazar, Sredni, La Loma y de Granos”, explicó.

También trabajan para rehabilitar el callejón del Meao, así como el mercado de La Magola, en el cual se están adelantando intervenciones en cubiertas, pisos y demás espacios.

“Queremos hacer una reactivación de 15 días para que en las noches se tengan restaurantes y espacios culturales para que vivan esta experiencia de lo que será el Centro”, sostuvo el secretario Cianci.

De igual manera, mencionó que las próximas administraciones deberán trabajar en aspectos como la recuperación de las fachadas de los edificios patrimoniales y la plaza San Nicolás, entre otros.

Este plan estratégico de restauración tuvo en cuenta como área principal el polígono conformado entre las carreras 40 y 46, entre las calles 30 y 35. Además, tuvo en cuenta las áreas aledañas a dicho sector.

Es importante destacar que este plan –que contó con el respaldo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo y el apoyo y financiamiento de la Unión Europea– busca beneficiar a alrededor de 300.000 personas que habitan, circulan o trabajan en las zonas a intervenir.

Paola Moreno, consultora de Idom –empresa de consultoría de origen español que lideró la construcción del plan–, indicó que en este estudio lograron encontrar la presencia de edificaciones en estado de abandono, contaminación atmosférica, falta de soluciones de movilidad, déficit de infraestructura y espacios verdes, entre otros.

El objetivo fue establecer las directrices generales de actuación que busquen redireccionar el desarrollo del Centro Histórico de la ciudad, a través de la identificación de oportunidades, según explicó Moreno.

“En el análisis que hicimos encontramos un territorio con unas vocaciones muy claras. En cuanto al patrimonio construido, encontramos predios nivel 2 que no cuentan con características patrimoniales”, puntualizó.

Destacó también que la visión al año 2042 es posicionar el Centro como un territorio estratégico y sostenible, caracterizado por su valor cultural, patrimonial, habitacional y económico, así como por ser una pieza de ciudad.

Con la esperanza de que mejore su estilo y calidad de vida, los vendedores y comerciantes del Centro –que serán reubicados en diferentes espacios que actualmente se encuentran en construcción– manifestaron su respaldo al proyecto de intervención integral que se plantea.

Diana Gutiérrez, propietaria de un restaurante en el Centro desde hace diez años, será una de las reubicadas en el mercado Sredni, lugar en el que espera brindar un mejor servicio a sus comensales.

“Esto es realmente algo positivo porque tendremos un espacio chévere en el que ya no tendremos que huir de la lluvia”, expresó Gutiérrez.

Mientras atiende el negocio de variedades que tiene desde hace 28 años, Orlando Navas indicó que para que estos nuevos espacios den resultados positivos deben ser socializados con la comunidad beneficiaria, ya que estos son los actores que conocen las necesidades que deberán suplir.

“Van a reubicarme y esperamos tener más ventas y crear un mejor espacio”, manifestó.

La ciudadana Adelina Chavarría destacó que el proyecto que se plantea cambiaría completamente la visión de lo que es el Centro y daría paso a otras actividades socioculturales: “Me parece una iniciativa maravillosa ya que tendríamos otra parte a donde ir”.