El negacionismo de Trump y de aquí
Tipos como Trump, que desconocen la degradación ecológica, son un peligro para la humanidad y no se comprende que en la principal democracia liberal del mundo lo hayan elegido dos veces presidente.

Tipos como Trump, que desconocen la degradación ecológica, son un peligro para la humanidad y no se comprende que en la principal democracia liberal del mundo lo hayan elegido dos veces presidente.
No me toma por sorpresa lo del Pacto Histórico en el Atlántico. El M-19, cuando entró a la arena electoral, se volvió una mierda bajo la denominación de Alianza Democrática M-19. Se la tomaron los apetitos desmesurados por las curules y los cargos públicos. Y oportunistas como “chequera negra”, sin ningún récord insurgente, se volvieron jefes con poder.
Hemos sido muy claros en lo siguiente: el Grupo Argos ha realizado compensaciones ambientales en el Atlántico, pero ellas no subsanan el daño ecosistémico causado en Ciudad Mallorquín.
La universidad que él concibió y dirigió es hoy un bochornoso epicentro de incendiarios brotes extremistas y un codiciado botín de medio billón de pesos. En el fondo, la pelea es por ese tesoro presupuestal y por el control de la burocracia. Eso es lo que se disputan con fauces de implacable mordedura.
El semáforo de Las Flores debe estar pensado especialmente para proteger la vida del vecindario y su colocación convendría fijarse en el punto de la Vía 40 donde resulte técnicamente más conveniente. La solución semafórica de Las Flores debe poner término a sus angustias vehiculares de muchos años.
La voz de alerta que lanzamos hoy es que el Mapa de Zonificación Ambiental del nuevo Pomca podría, por lo que hemos visto, no responder a la expectativa ciudadana de que se preserve lo que queda del bosque seco tropical en el suelo urbano y de expansión urbana de Puerto Colombia y Barranquilla, ubicado en la cuenca hidrográfica objeto del plan.
No es una sorpresa la erosión sin pausa del tajamar que motivó la reacción del alcalde Alejandro Char y el anuncio de Cormagdalena de una curación puntual mientras un estudio pormenorizado define qué plan reconstructivo se sigue.
Petro llegó al poder porque millones de colombianos admiraron sus discursos bien hilvanados de Congreso y plaza pública. Hoy escandalizan sus frases entre insólitas y malsonantes en las que destellan la incoherencia y la ordinariez.
Esto es como para una antología de la estolidez. Le Corbusier, quien aportó una serie de obras reconocidas como Patrimonio de la Humanidad, habría sonreído sardónicamente ante tal necedad.
Pero hoy hay mayor conciencia de que requerimos un urbanismo bioclimático y un reto de las ciudades es densificar las áreas ya pobladas con mayores alturas, proteger los espacios verdes y disponer de sistemas de transporte que no contaminen.