Durante el 2023 la violencia le arrebató la vida a líderes sociales y defensores de derechos humanos, quienes desde sus procesos en diferentes territorios trabajaban por sus comunidades.
A través de esta campaña del programa Somos Defensores, se pretende combatir la impunidad de los asesinatos de esta población en el país.
Ya son varios los casos de muertes de líderes indígenas atribuidos a las mafias de tala de madera en la selva.
Según la Defensoría del Pueblo, en 2023 fueron asesinados 181 líderes, lideresas y personas defensoras de derechos humanos. Del total, 160 eran hombres y 21, mujeres.
Cauca, Antioquia, Nariño y Valle del Cauca, son las regiones en las que más número de siniestros se han registrado.