Héctor Lavoe, considerado por algunos como el máximo exponente de la salsa, murió en 1993, a los 46 años, en un hospital de Nueva York.
Lavoe cantó para el público barranquillero en tres ocasiones durante su vida artística: en 1978, 1980 y 1986.
Tras 22 años de su muerte, sus seguidores lo mantienen vivo.
Fue ubicada en el complejo recreativo de La Guancha. La hija del cantante, Leslie Pérez, estuvo en el homenaje.

