El cuerpo permaneció por varias horas sin identificar, pero un familiar se acercó y mencionó que se trataba de un joven oriundo de Venezuela.
Se trata del cuerpo de un hombre que, al parecer, horas antes había sido secuestrado en un barrio de la capital de La Guajira.
Las víctimas aparecieron armadas con pistolas y una de ellas portaba un brazalete del ELN.
El puercoespín descubierto es más pequeño que sus hermanos, pero su cola es más larga.
Los cuerpos sin vida fueron retirados por miembros de la etnia wayuu alegando usos y costumbres de la cultura indígena en el departamento.