El inusual hecho de dos personas que no hablaban portugués y que arrendaron la más exclusiva propiedad de la ciudad de Boavista, Brasil, fue clave para que las policías colombiana y brasilera pudieran percatarse de que se trataba de Marcos Figueroa, alias ‘Marquitos’, y de su primo Milton Figueroa, alias Norte.
La búsqueda del criminal más peligroso de la historia reciente del país se inició desde hace un año, cuando se expidieron las órdenes de captura, en una coordinación entre la inteligencia de la Policía y la Policía Judicial.
En medio de la pesquisa, se dieron cuenta las autoridades de que ‘Marquitos’, alertado por los requerimientos judiciales y la presión policial, salió de La Guajira hace 11 meses hacia Venezuela, donde anduvo por las localidades de San Cristóbal y Valencia, acompañado de no más de tres de sus escoltas de entera confianza, entre ellos alias Norte.
Fachada de la casa de descanso en Boavista donde fue capturado alias ‘Marquitos’.
En el vecino país, Figueroa no se comunicaba por celular ni por internet para no ser ubicado, sino que usaba básicamente correos humanos para mandar y recibir mensajes.
Según fuentes policiales, estos correos humanos, entre ellos una de sus amantes, recorrían varios países, como Panamá, antes de llegar a Venezuela a entrevistarse con ‘Marquitos’.
Estando en el vecino país, un golpe inesperado lo hizo cambiar de rumbo: la captura de uno de los líderes de los ejércitos antirrestitución y uno de sus compinches, Omar Montero, alias Codazzi, quien cayó el 24 de julio pasado en el estado venezolano de Trujillo.
Entonces el exparamilitar partió hacia Brasil, cerca de la frontera con Venezuela, en la localidad de Boavista. La Policía se percató de este movimiento y envió a dos de sus hombres de inteligencia a Brasilia, para coordinar con el nivel central de la Policía Federal de Brasil.
A través de estas labores investigativas, se percataron de que habían llegado a Boa Vista unas personas que no hablaban portugués sino español y este detalle poco usual en esta ciudad, llama la atención de los detectives, quienes tras un seguimiento, se dan cuenta de que se trata ni más ni menos que de ‘Marquitos’.
En Boavista, una localidad a siete horas de vuelo de Brasilia, los criminales manejaban importantes sumas de dinero en efectivo, arrendaron una lujosa casa de descanso campestre y se movilizaban en tres vehículos con placas venezolanas.
Tras el operativo, en el que no se presentaron enfrentamientos y participaron unos ocho policiales brasileños y los dos colombianos, se coordinan los trámites de rigor para tratar de traer a Figueroa al país el próximo viernes.
En el acervo probatorio policial se cuenta con interceptaciones telefónicas a miembros de su organización criminal, ordenadas por la Fiscalía 1 de la Unidad de Bacrim, así como entrevistas a los testigos de los hechos.
La Policía destaca que el Juzgado 2 de Garantías requiere a ‘Marquitos’ por los delitos de homicidio agravado, porte ilegal de armas y concierto para delinquir.
La Fiscalía, por su parte, informó que Figueroa tiene medida de aseguramiento de detención en centro de reclusión por los homicidios de Dilger Elkin de Jesús Becerra Ramírez, asesor del Ministerio de Transporte, y otras dos personas. También cursa en su contra una investigación preliminar por los homicidios de Yandra Brito y su esposo Henry Ustáriz Guerra, así como de Wilfredo Fonseca Peñaranda, uno de los escoltas de estas dos víctimas.
El ente acusador precisó que los procesos los adelanta la Dirección de la Fiscalía Especializada contra el Crimen Organizado.
Al respecto, el ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón dijo en rueda de prensa que la captura fue 'un extraordinario trabajo policial de más de dos años por varios países'.
Agradeció el alto funcionario la colaboración de las autoridades de Brasil 'y reconocemos la presencia de nuestros policías allá, realizando la captura'.
Agregó Pinzón que 'este delincuente tenía cinco órdenes de captura y más de cien investigaciones de la Fiscalía por homicidios cometidos en nuestro país'.
Y concluyó que 'este golpe muestra que no hay delincuente que se pueda esconder en ningún lugar del mundo'.
Por su parte, el director de la Policía, general Rodolfo Palomino, explicó que previo a la detención 'habíamos podido recibir varias informaciones de fugaces movimientos de ‘Marquitos’ especialmente para mantener contacto con estas bandas de narcotráfico y contrabando de combustible entre La Guajira, el norte del Cesar y Venezuela'.
Advirtió además el oficial que Figueroa 'es el criminal de lejos de más alta peligrosidad de la historia reciente del país'.
Criticó el general que 'muchas informaciones dirigidas a desorientar, señalaban que este delincuente permanecía en La Guajira protegido por la Policía', pero aclaró: 'era en el lugar más exclusivo de Boavista donde estaba escondiéndose y esta captura es un alivio para sus víctimas, y quiero pedirles a ellos, guajiros y cesarenses, que denuncien, porque ya lo tenemos capturado y ha dejado de ser una amenaza'.
Y agregó al respecto que 'esperamos que estas gentes buenas de La Guajira y Cesar denuncien para aclarar homicidios y otros hechos extorsivos incluso a administraciones municipales'.
Sobre los estragos de esta criminalidad en la península, concluyó: 'no podemos desconocer que en La Guajira existe un fenómeno criminal y es muy probable que surja alguna nueva cabeza, pero vamos a develar quién lo va a suceder y quiénes más quedan en la estructura'.
Vínculos de congresistas
La senadora Claudia López dijo que Figueroa solo pudo ser capturado cuando dejó de ser protegido en Colombia.
Según la senadora, ahora las autoridades tienen el deber de proteger a los testigos para que pueda condenarse a ‘Marquitos’. 'Aún hay un largo trabajo por hacer para desmontar la banda de alias ‘Marquitos', dijo la senadora de la Alianza Verde al denunciar que algunos miembros del Congreso representan su supuesta estructura criminal y señaló directamente a Antenor Durán, representante de La Guajira y al senador valduparense José Alfredo Gnecco del partido de La U.
López añadió que 'es de público conocimiento que José María Ballesteros, actual gobernador de La Guajira, tiene el respaldo de Jesús Francisco Kiko Gómez Cerchar' y que también apoyó a Durán y a Gnecco.
