El Heraldo
Barranquilla

Con Bocas de Ceniza se ahogó el muelle de Puerto de Colombia

"El primer designado Alberto Pumarejo y el ministro de Obras Públicas César García, cuando observaban la entrada del primer barco a Bocas de Ceniza, el 22 de diciembre de 1936.

La primera salida al mar que tuvo Barranquilla en el siglo XIX fue la Bahía de Sabanilla. Este fue el primer puerto importante de comercio exterior que tuvo Colombia, el cual surgió por la necesidad de exportar tabaco hacia Europa.

Para llegar al puerto las embarcaciones navegaban a través del Caño de la Piña, que comunicaba a Barranquilla con Sabanilla, donde atracaban los barcos de la época. Después, con la inauguración del Ferrocarril de Bolívar, el 1° de enero de 1871, la vía acuática dejó de ser utilizada para el transporte de carga hasta la bahía.

Inicialmente, el ferrocarril iba desde el Puerto Fluvial de Barranquilla hasta Sabanilla, luego se prolongó hasta Salgar y finalmente hasta Puerto Colombia, donde se dio origen al muelle en 1888. “En ese año las exportaciones ya no eran de tabaco porque este se acabó en grandes cantidades en 1875”, indica Jorge Villalón, historiador y docente de la Universidad del Norte.

“Lo que se hizo para el tabaco se utilizó finalmente para el café. Y el muelle prácticamente se agrandó, en 1893, con el ingeniero cubano Francisco Javier Cisneros, ante el aumento impresionante de los sacos de café que salían por allí”.

Para explicar el fenómeno, cita un aparte del libro El Café en la sociedad colombiana, de Luis Eduardo Nieto Arteta. “El destino y el desarrollo local de la ciudad de Barranquilla están vinculados al café, como antes, pero en una escala menor, lo estuvieron al tabaco y a la quina”.

Auge comercial. Entre 1871 y 1920, Barranquilla se consolida como paso obligado del comercio exterior colombiano a través de la conexión con el muelle de Puerto Colombia. En el libro Una invitación a la historia de Barranquilla, el autor Eduardo Posada Carbó reseña que “entre 1881 y 1925, se crearon en Barranquilla 60 establecimientos industriales; este número se duplicó durante los siguientes cinco años”.

“Entre 1931 y 1938, se creaban otras 153 industrias, y este número volvía a duplicarse entre 1939 y 1945. Entre 1881 y 1945, se habían fundado en Barranquilla 595 establecimientos industriales”.

Según Villalón, el auge industrial de Barranquilla en la década de los veinte y treinta fue el resultado de su auge comercial como primer puerto marítimo y fluvial de Colombia. “Las características de enclave de este auge implicaron que el proceso de industrialización nunca tuvo raíces firmes en la economía regional costeña”.

Traslado del puerto. En 1920, luego de que terminara la Primera Guerra Mundial y abrieran el Canal de Panamá, comenzó a funcionar de manera sostenida el puerto de Buenaventura, por donde se empezó a exportar café hasta sobrepasar considerablemente el número de toneladas que salían desde Puerto Colombia (ver gráfica).

Fue entonces cuando en Barranquilla decidieron hacer un super puerto para contrarrestar la competencia, con la apertura de los tajamares de Bocas de Ceniza, en 1936. Desde ese momento comenzó el triste final del muelle de Puerto Colombia.

“El costo de esto fue enorme porque al cerrar el paso de agua dulce se murieron todas las playas hasta Puerto Colombia. Con los tajamares de Bocas de Ceniza se destruyó el estuario, a raíz de esa buena intención, y el resultado fue el abandono del muelle”, señala el historiador.

“Dicen que la construcción de Bocas de Ceniza fue porque se dañó el de Puerto Colombia, pero yo no tengo ninguna evidencia de que eso haya sido así. La pregunta entonces es: ¿por qué se produce el traslado, por qué la necesidad de construir este puerto aquí, si ya estaba el de Puerto Colombia?”.

Tras la inauguración de Bocas de Ceniza, el 22 de diciembre de 1936, comenzó a disminuir ostensiblemente la cantidad de carga que salía desde Barranquilla, hasta que “se ahogó en 1950”.

“La fragilidad de la economía regional costeña se hizo evidente cuando la ciudad perdió el liderazgo portuario. Las observaciones hechas en 1952 por el Consejo Nacional de Planeación sobre Barranquilla siguen siendo ciertas: su futuro no está vinculado tanto a su posición de puerto, aunque esta condición será siempre importante, como a la explotación de la gran región interior del Magdalena, Bolívar y Córdoba”, cita el docente universitario.

Los impactos de Bocas de Ceniza, según Parrish
Según Karl Parrish, las obras de Bocas de Ceniza “pondrían en contacto con el litoral millares de hectáreas de tierras fértiles agrícolas a lo largo del Río Magdalena, poniendo sus productos al alcance de transportes marítimos en todas partes del mundo. Es en las primeras 300 millas desde la Costa Atlántica donde están las grandes oportunidades de desarrollo. Todos los productos del Magdalena, del bajo Cauca, del San Jorge, del Cesar y otros ríos, podrían surtirse con transporte barato a los puertos extranjeros”. Los trabajos consistieron en construir dos tajamares de roca, uno en cada margen del Río, a manera de prolongación de las riberas, pero reduciendo al mismo tiempo su boca.

Influencia extranjera en comercio y cultura
A finales del siglo XIX, la llegada de inmigrantes extranjeros, principalmente de Alemania, Estados Unidos e Italia, fue determinante en la vida comercial y cultural de Barranquilla. En la imagen se observa el movimiento en el muelle.

Por Víctor Ovalle Gil

Facebook
Twitter
Messenger
Whatsapp
Convierta a El Heraldo en su fuente de noticias
X
COMO REPORTAR A WASAPEA
1. Agrega a tu celular el número de Wasapea a EL HERALDO: +57 310 438 3838
2. Envía tus reportes, denuncias y opiniones a través de textos, fotografías y videos. Recuerda grabar y fotografiar los hechos horizontalmente.
3. EL HERALDO se encargará de hacer seguimiento a la información para luego publicarla en nuestros sitio web.
4. Recuerda que puedes enviarnos un video selfie relatándonos la situación.