En unos seis meses aproximadamente Barranquilla volverá a tener un recuperado y suntuoso edificio republicano, fiel a los postulados del neoclasisismo francés, dispuesto para algún fin cultural en la ciudad.
Se trata del antiguo Banco Dugand, que llegó a ser uno de los más importantes de Colombia durante la década de los 20 y que hoy es restaurado por un privado tras más de 50 años a la merced del comercio informal.
'Esta obra tiene un valor arquitectónico inimaginable porque fue una construcción muy honesta. No tiene errores', consideró el director de obra, el arquitecto Ignacio Consuegra.
La edificación, situada en la carrera 32 con calle 43, en el corazón del Centro Histórico, fue comprada hace unos dos años por el empresario Álvaro Correa, quien ha invertido en el último año unos $300 millones en la restauración del inmueble.
El Banco Dugand fue construido entre 1920 y 1922 bajo la dirección del arquitecto jamaiquino Leslie Arbouin y con la estética más exigente de la época, según lo documenta la historia.
La obra fue ejecutada bajo los criterios del estilo ‘colosal’, por lo que cuenta con columnas robustas y muros macizos. En cuanto a su fachada, esta se encuentra adornada con distintos ornamentos geométricos y enmarcada en un portal en alto relieve.
Por su importancia, fue declarado Monumento Nacional bajo el decreto 2000 del 1o. de noviembre de 1996.
'Lo triste es que Barranquilla sea una ciudad depredadora y que no guarda respeto a su patrimonio', criticó el experto, quien hizo referencia a la tendencia de demoler edificaciones antiguas en la ciudad.