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Por las calles de Barranquilla deben circular 10.000 taxis, de acuerdo con la normatividad del Ministerio de Transporte, pero en la práctica, el parque automotor supera los 15.000, de acuerdo con estimativos de las autoridades de transporte y del gremio de taxistas.

Esta sobreoferta que agrava la circulación vehicular, se deriva en buena parte por los cupos ‘gemelos’ o ‘trillizos’, una irregularidad que está siendo investigada por Movilidad, Fiscalía y Sijín.

A esta problemática se agrega la autonomía que el Gobierno Nacional otorgó a los alcaldes para definir el número de taxis que necesita su municipio, lo que para el caso del Distrito, agravaría el panorama porque terminaría de acrecentar la sobreoferta.

Lo anterior, teniendo en cuenta la proximidad con Puerto Colombia y Soledad, que son precisamente los dos municipios que aún no firman el acuerdo para otorgar la autoridad única de transporte al Área Metropolitana de Barranquilla, AMB.

El gemeleo. Esta práctica, para nada novedosa en el sector, hizo que la Secretaría de Movilidad del Distrito haya puesto la lupa en el proceso de reposición de cupos de vehículos de servicio público que son denunciados como robados.

Lo anterior, explica el titular de la dependencia, Walid David Jalil, debido a que han detectado que en algunos casos los que solicitan la cancelación de matrícula por hurto han presentado documentación falsa.

Ya en el 2012, el entonces secretario de Movilidad, Jaime Pumarejo Heins, había puesto en conocimiento de las autoridades irregularidades en los trámites de cancelación de matrículas por hurto de taxis y otras inconsistencias en los cupos.

¿Cómo opera esta modalidad de taxis ‘gemelos’ y ‘trilizos’?

Desde el 2001, la restricción del ingreso de taxis al parque automotor de la ciudad está restringido mediante el decreto 191 del Ministerio de Transporte.

Para el caso de Barranquilla, los cupos que han sido solicitados en los últimos cinco años han sido otorgados por reposición y no por ingreso de nuevos carros.

Por lo general, los que solicitan la reposición, que se hacen llamar ‘gestores’ o ‘cuperos’, realizan los trámites ante la Secretaría de Movilidad.

Estas personas entregan la presunta denuncia penal del hurto del vehículo, instaurada ante la Fiscalía, para obtener la certificación que indica que el automotor ha sido hurtado y no ha sido recuperado, con la finalidad de realizar el trámite de reposición sin cumplir con los requisitos de ley.

'Como esta denuncia no ingresa al sistema de la Policía, el taxi ‘hurtado’ sigue circulando. Y esa misma placa la usan para varios vehículos. Es lo que llamamos cupos gemelos', explica un funcionario de Movilidad.

En junio de 2012, unidades de la Sijin detuvieron a cuatro personas en la Secretaría de Movilidad de la sede Cordialidad que, supuestamente, tramitaban cupos de taxis con denuncias por hurto falsas.

En 2007, el entonces director de Metrotránsito, Carlos Altamar Arias, fue investigado por irregularidades descubiertas en la asignación de 2.400 cupos a vehículos de servicio público en Barranquilla, para lo cual fueron falsificados documentos, improntas y las firmas de los verdaderos dueños de los automotores.

Por cada cupo, funcionarios de la entidad cobraban aparentemente entre ocho y diez millones de pesos. Altamar paga una condena de 13 años y un mes.

Autonomía a alcaldes. En lo que se refiere a Barranquilla, el problema de la sobreoferta de taxis se agrava teniendo en cuenta que en febrero pasado, el Mintransporte expidió un nuevo decreto nacional, el 198.

Esa disposición autoriza a los alcaldes a realizar estudios independientes de oferta y demanda y definir sin ningún control, el número de taxis que necesitan.

Una de las primeras administraciones en poner en práctica estas facultades fue Puerto Colombia, con 91 nuevos taxis, que solo pueden circular dentro de su jurisdicción.

No obstante, se tendrá que estudiar la validez, del documento por cuanto habla de'Área Metropolitana de Puerto Colombia', cuando lo correcto es 'Área Metropolitana de Barranquilla', por lo que si esos taxis salen fuera de la jurisdicción de Puerto, están obligados a portar la planilla que existe el Mintransporte.

Taxis colectivos. Tener un taxi en Barranquilla no es muy buen negocio, dicen veteranos conductores como Rubén Martínez de la Hoz, quien confiesa que se ve obligado a prestar el servicio como ‘colectivo’, otro problema creciente en la ciudad.

Álvaro Forero, presidente de Conaltaxis, capítulo Barranquilla, señala que desde hace 10 años el gremio está pidiendo que se cree la Autoridad única de Transporte Metropolitano que maneje además Soledad, Puerto Colombia, Galapa y Malambo.

Recordó que en la administración del alcalde Humberto Caiafa hubo consenso, pero al Área Metropolitana le dieron solo facultades de transporte colectivo urbano (buses), Soledad fue el único municipio que no entregó toda la documentación.

Desde entonces, el gremio de taxistas gestiona que haya una autoridad única de transporte, en el que sean incluidos los taxis.

Soledad y Puerto Colombia no han firmado el acuerdo para que el AMB asuma como autoridad única. El ‘florero de Llorente’ la constituyó la operación de los primeros 91 vehículos tipo taxis matriculados en Puerto Colombia, hecho que originó que el Secretario de Movilidad del Distrito, restringiera la circulación de estos vehículos en Barranquilla, solicitando para ello la planilla única de viaje ocasional, pese a que Puerto Colombia hace parte del Área Metropolitana de Barranquilla.

Protestas. Esta restricción generó una serie de protestas por parte del gremio de taxistas.

Al mismo tiempo, los alcaldes de Soledad, Franco Castellanos, y de Puerto Colombia, Carlos Altahona, señalaron que el Distrito en cabeza de la Alcaldesa, el secretario de Movilidad de Barranquilla y el director del Área Metropolitana, diseñaron de manera unilateral el Acuerdo Metropolitano.

Walid David Jalil respondió que en junta del Área Metropolitana del 26 de junio pasado presidida por Diana Amaya como alcaldesa (e) de Barranquilla, a la que asistieron los alcaldes de Puerto Colombia y Malambo, entre otros, se habló de entregar el documento del Acuerdo para que fuera revisado. Para hoy se tiene programada una nueva reunión para debatir el tema.

Taxis por reposición. El incremento de taxis está restringido en el país por el Decreto 172 de 2001, pero sí se pueden matricular por reposición. Es decir por hurto o deterioro del vehículo. Un cupo de taxis en Barranquilla está entre 15 y 20 millones de pesos. En otras ciudades del país, como Bogotá está en $80 millones; Medellín, en $60 millones, y Cali, en $50 millones. Álvaro Forero, presidente de Conaltaxis, dice que en Barranquilla aproximadamente se realizan unas 10 chatarrizaciones por mes.

Por Leonor De la Cruz
leonor.delacruz@elheraldo.co