'El juez llegaba todas las mañanas, pero hoy no lo hemos visto como es de costumbre', dijo una mujer que labora en el sector donde queda ubicado el despacho del juez promiscuo municipal de Puerto Colombia, Mario Alberto Ospino, que en las últimas horas había ordenado la suspensión del proceso de caducidad del millonario contrato de conectividad otorgado a la Unión Temporal Centros Poblados.
En las instalaciones del juzgado solo se encuentra el secretario del togado a quien un equipo de EL HERALDO contactó para intentar tener algún acercamiento con el juez; sin embargo, el asistente aseguró que todos los trámites se realizaban a través de los medios tecnológicos por temas de la pandemia de la covid-19.
Esta casa editorial envió los requerimientos a un correo electrónico, pero hasta la publicación de esta nota no se había obtenido respuesta alguna.
Las personas que frecuentan la zona del juzgado de ese municipio del área metropolitana de Barranquilla aseguraron que era habitual ver al juez Ospino llegar todas las mañanas, pero que hoy no lo han visto.