¿Qué hacen los peloteros colombianos en medio de la huelga en la MLB?

“Lo único que uno puede controlar es seguir preparándose y tratando de mejorar cosas nuevas para cuando llegue el momento de jugar. En este tiempo me la he pasado buscando la mejor versión de mí, mejorando mi velocidad, mi mecánica, viendo las cosas buenas y malas del año pasado, enfocándome en esas cosas. Estoy cogiendo estos días como si estuviese en el spring training (entrenamiento primaveral) y me he mantenido bien, y esperando que en estos días se presenten buenas noticias”, comentó Crismatt en diálogo con EL HERALDO.

El derecho barranquillero de los Padres de San Diego se encuentra en su casa en la ciudad de la Florida, Estados Unidos, pero diariamente se reúne con  Patiño, de los Rays de Tampa Bay, y Quintana, de los Piratas de Pittsburgh, en la casa de este último o en algún gimnasio.

“Trabajo todas las mañanas con ellos, lo tomamos como si fuera un spring training, hacemos la rutina y tiramos dos veces por semana, tratando de ver bateadores. Queremos estar listos para cuando llegue la competencia”, expresó Crismatt, que prefiere no estresarse pensando si el acuerdo entre los jugadores y la Major League Baseball (MLB) se está demorando demasiado.     

“Yo no puedo controlar eso. Estoy de acuerdo con todo lo que están haciendo (en el sindicato de peloteros). Todo lo que están pidiendo es muy bueno y de beneficio para todos los jugadores. Sinceramente, si todos estamos en la misma página, yo también estoy en esa página. Espero, con el favor de Dios, que se llegue a un acuerdo lo antes posible para empezar a jugar el día pactado. Ya todos quieren empezar a jugar”, dijo el serpentinero currambero.      

Más allá de que todavía no se tenga total claridad sobre el final de la para, Crismatt se esmera por entrenarse y mantiene firmes las mismas expectativas positivas de siempre.
“Simplemente espero la llamada para coger las maletas e ir a competir, más nada. 

Quiero seguir en Grandes Ligas, volver a estar ahí con el equipo, ayudarlo en lo que pueda y, con el favor de Dios, llegar a la postemporada. Obviamente, con el sueño de todo jugador de llegar a una Serie Mundial, pero lo más importante es mantenerse saludable”.   

Acerca de la intención de la MLB de prohibir las formaciones defensivas en el béisbol, la cual ha generado opiniones divididas, Crismatt apuntó: “Pienso que todas las cosas que proponen siempre van, como quien dice, en contra del pitcheo. El béisbol ha cambiado mucho en los últimos años y uno no tiene el control de eso, simplemente trata de amoldarse a las reglas. Hay que controlar lo que uno puede controlar. Hay que tirar la bola y sacar outs”.

Aunque no fue protagonista de esa gesta, Crismatt siente que una de las grandes alegrías que le ha dado este 2022 es el título de los Caimanes en la Serie del Caribe. 

“Fue algo grande, como jugador lo llena a uno de orgullo ver cómo esos muchachos dejaron el nombre del país en alto. Estoy muy contento, no he tenido la oportunidad de encontrarme con ninguno para felicitarlos personalmente. Fue algo muy emotivo, ojalá sigamos por ese camino y el béisbol colombiano siga creciendo y participando en eventos importantes”.

Nueva motivación

No todo es malo en medio de la huelga. Crismatt disfruta por estos días compartir con su esposa, María Alejandra Nobmann, y con la motivación de ambos, la pequeña Nicole, de solo dos meses de nacida. 
“Aquí la tengo enfrente, es el amor mío. Le doy gracias a Dios por permitirme estar más tiempo con ella ahora, viéndola crecer. Cuando uno empieza a jugar, el tiempo para compartir es muchísimo más corto, aunque ellos siempre están conmigo”.